Tortillas de maíz: Este es el truco para que estén suaves más tiempo

La nixtamalización, técnica ancestral no solo aporta calcio a la tortilla, sino que también incrementa la biodisponibilidad de otros nutrientes

Por: Andrés Manuel Contreras Alaniz

La tortilla, alimento fundamental en la gastronomía mexicana, no solo deleita nuestro paladar con su sabor único, sino que también constituye un pilar nutricional con múltiples beneficios para la salud, según investigaciones de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Cuautitlán.

La tortilla, elaborada a partir del maíz, alimento ancestral de México, ofrece un valor nutricional excepcional. Rica en carbohidratos complejos, se convierte en una fuente de energía vital para el organismo.

PROPIEDADES DE LAS TORTILLAS

Además, sus propiedades antioxidantes actúan como un escudo protector contra enfermedades crónico digestivas, promoviendo un sistema digestivo saludable. En el caso de los niños, la tortilla juega un papel importante en el desarrollo de huesos y dientes fuertes, gracias a su contenido de calcio

La nixtamalización, técnica ancestral que consiste en cocer el maíz con cal, no solo aporta calcio a la tortilla, sino que también incrementa la biodisponibilidad de otros nutrientes esenciales como el hierro y el fósforo.

Además, este proceso enriquece la tortilla con aminoácidos, fibra soluble y almidón resistente, componentes que contribuyen a una salud intestinal óptima y a la prevención de enfermedades crónicas.

¿QUÉ HACER PARA QUE LAS TORTILLAS DE MAÍZ NO DE ENDUREZCAN TAN RÁPIDO?

Para preservar la frescura y suavidad de las tortillas, el doctor en Bioquímica y reconocido Tiktoker, Rafael Carbajal, comparte un truco sencillo pero efectivo.

Recomienda separar las tortillas recién hechas, dejarlas enfriar extendidas durante 20 minutos para liberar el exceso de humedad, y luego apilarlas nuevamente.

A continuación, sugiere envolverlas en una servilleta de tela, que permitirá mantener la humedad adecuada, y guardarlas en una bolsa de plástico bien cerrada dentro del refrigerador.

Este método no solo evita que las tortillas se sequen y se vuelvan rígidas, sino que también previene la formación de moho, garantizando así su calidad y sabor por más tiempo.

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