Durante años se ha relacionado la celebración del Sábado de Gloria con el agua. Aquí te explicamos de la razón de este significado religioso
Por: Marcela Islas
La Semana Santa conmemora los episodios más importantes que relatan los últimos días de Jesucristo en este mundo, lo que representa para la fe católica una de las mayores festividades para su iglesia.
En el transcurso de los días Santos, que inicia desde el Jueves Santo y hasta el Domingo de Resurrección o Domingo de Pascua, hay diferentes eventos determinados por la tradición religiosa.
El Sábado de Gloria representa una jornada de luto y reflexión, al igual que el Viernes Santo. La diferencia es que durante este día la iglesia no realiza eucaristías, no toca las campanas, el Sagrario se deja abierto y vacío, el altar está despojado y no se administra ningún sacramento excepto la Unción de los enfermos y la Confesión de los pecados.
¿POR QUÉ LA GENTE SE MOJA DURANTE ESTE DÍA?
Esta creencia se remonta desde la Edad Media, cuando la Iglesia Católica ordenaba a los fieles religiosos a mantener el luto durante la Semana Santa. En el transcurso de estos días, se acostumbraba no bañarse, como efecto del guardar. Al finalizar este periodo, en Sábado de Gloria, las personas se lanzaban agua no sólo para bañarse, sino para purificar su alma y limpiar sus pecados, de una manera simbólica.
CELEBRACIÓN DEL SÁBADO DE GLORIA
El Sábado de Gloria se traduce como un día de silencio y cuando cae la noche, es cuando se lleva a cabo la Vigilia Pascual, en la cual simboliza acompañar a la Santísima Virgen María, quien vela en soledad la tumba de su hijo.
Esta ceremonia debe llevarse a cabo antes de la medianoche, incluyendo los siguientes elementos:
- Celebración del fuego. En este acto el sacerdote bendice el fuego y enciende el cirio pascual. Las personas asisten con velas y son encendidas a través del cirio pascual para ser bendecidas con el fuego. Se ingresa a la iglesia en total oscuridad y se va iluminando para simbolizar la luz de la Resurrección de Cristo.
- Liturgia de la palabra. Se leen siete pasajes de la Biblia, desde la Creación hasta la Resurrección.
- Liturgia bautismal. Se bendice el agua, se bautiza a los nuevos cristianos y se renuevan los compromisos bautismales.
- Liturgia de la Eucaristía. Es la Eucaristía más especial. Los cristianos reciben la bendición.