El imponente árbol considerado como el más antiguo del país, supera los 42 metros de altura, ha sido testigo de la historia prehispánica del país
México, un país rico en biodiversidad y cultura, alberga maravillas naturales que deslumbran a visitantes de todo el mundo. Uno de estos tesoros es el Árbol del Tule, considerado el más antiguo de México y el más grande del planeta.
Este imponente árbol considerado como el más antiguo del país, supera los 42 metros de altura, ha sido testigo de la historia prehispánica y colonial del país, con una antigüedad estimada de más de 2 mil años.
¿EN DÓNDE SE ENCUENTRA EL ÁRBOL MÁS ANTIGUO DE MÉXICO?
El considerado árbol más antiguo del territorio mexicano se encuentra ubicado en el pintoresco pueblo de Santa María del Tule, a tan solo 12 kilómetros de la ciudad de Oaxaca de Juárez.
Se dice que fue plantado por un sacerdote zapoteca en honor a Ehécatl, el dios del viento, convirtiendo su ubicación en un sitio sagrado que más tarde fue ocupado por la iglesia.
El Árbol del Tule no solo es un símbolo natural, sino también un lugar de celebración. Cada segundo lunes de octubre, los habitantes rinden homenaje a la Virgen de la Asunción durante la fiesta patronal de Santa María El Tule, un evento lleno de color y tradición que incluye la quema de castillos de cohetes.
Para garantizar su protección y conservación, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales ha reconocido la importancia del Árbol del Tule, lo que permite a la comunidad local gestionar su cuidado y asegurar que futuras generaciones puedan disfrutar de su majestuosidad.
HISTORIA DEL ÁRBOL DEL TULE
A lo largo de los siglos, el Árbol del Tule ha capturado la admiración de quienes lo visitan. Aunque su edad exacta es desconocida, su resistencia a los cambios climáticos y a la actividad humana lo convierte en un símbolo de vida y fortaleza. A pesar de haber sido retirado de la lista provisional de Patrimonio Cultural de la Humanidad de la Unesco en 2011, su valor histórico y cultural sigue siendo indiscutible.
El Árbol del Tule no solo representan la riqueza natural de México, sino que también es un recordatorio de la historia y la cultura que definen como nación. Visitar este emblemático árbol es sumergirse en el legado de un país que ha sabido cuidar y celebrar su herencia natural.