Un pilar fundamental
Por: Gerardo Armenta
El titular principal de la edición de Diario del Yaqui correspondiente al día jueves llamó poderosamente la atención. No podía ser de otra manera si, incluso a título de vistazo, alguien se fijó en su enunciado. Éste, lo que sea cada quien, no pudo ser más explícito.
Helo aquí: “Huye CTM del PRI”. Y luego, en un titular complementario, o “bajada” o “secundaria”, como se decía antes en el oficio, un añadido que robustece el estupor original causado por el encabezado a ocho columnas: “Proyecta Villarreal apoyar a Claudia Sheinbaum, con quien ya platicaron”. Como se sabe, Javier Villarreal es el dirigente estatal de la CTM.
Pues bien: él mismo fue quien dijo que la Confederación de Trabajadores de México contempla brindar su apoyo político de Claudia Sheinbum en su camino a la Presidencia de la República, y que ya se tienden los puentes de enlace. Ante estas circunstancias, y lo que es posible inferir en una primera instancia, a los cetemistas les han caído muy bien las reformas en materia laboral puestas en práctica recientemente por el Gobierno Federal, tales como el incremento al salario mínimo, las vacaciones dignas y el aumento al fondo de pensiones.
El asunto a que se alude parece tener consigo toda la seriedad del mundo. Incluso, ha trascendido que los cetemistas hicieron entrega a Sheinbaum de un documento en el que califican como buenos los logros del Gobierno Federal en beneficio de la clase trabajadora, según reconoció, Óscar Ortiz Arvayo, cetemista hermosillense. Como vocero también dijo que “los trabajadores estamos viviendo una primavera laboral”.
Es obvio que todos los pormenores anteriores generan en principio una especie de incredulidad. Pero bien que sean atendidos acaso se pueda llegar a la conclusión de que tienen el aval de lo que deba considerarse como intenciones listas para ser llevadas a cabo. No puede ignorarse que la CTM es (o fue) uno de los sectores fundamentales de un partido como el PRI.
Es más: debió ser el último de los pilares del tricolor que tuvo que avenirse a entender que los tiempos del predominio priista y su famosa y efectiva trilogía política sectorial habían pasado simple o dramáticamente a la historia. Todavía más: en realidad habría que asumir que la CTM nunca volvió a ser la poderosa confederación obrera y política tras la muerte de su real y mitológico líder (las dos características al mismo tiempo) Fidel Velázquez.
En cierto modo, la defunción de don Fidel fue también de alguna manera la propia de la CTM. Y si estas líneas se antojan un tanto radicales o exageradas, podría decirse entonces que, tras la desaparición de su mítico y vitalicio líder, el cetemío ya no volvió a ser el mismo. Aparte, también hay que considerar que, en un momento determinado, y puestos en el contexto general del país, las cosas en México comenzaron políticamente a cambiar.
No en balde, por ejemplo, se acuñó la expresión “el viejo régimen” que alcanzó un rápido crédito conceptual y práctico. En esta figura, amén de otros protagonistas institucionales, se incluyó a organizaciones como la Confederación Nacional Campesina (CNC) y la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP), poderosas en el esplendor priista y hoy, sin ánimo de ofender, venidas a menos. En este marco, debe reconocerse que la CTM logró sobrevivir al embate de los nuevos tiempos políticos.
Aunque parecería que tal organización está por tirar la toalla priista para asumir la propia de Morena, si bien quizá deba ser pertinente plantear algunas otras observaciones. Y es que a lo mejor primero cabe preguntar si la que se va del PRI es sólo la CTM de Sonora o la CTM en su conjunto, es decir, la nacional. No se sabe de un anuncio en este último tenor, por lo menos hasta ahora.
El aviso de que la CTM huye del PRI debió ser impactante en más de un sentido, pero con la salvedad de que puede significar sólo un propósito atribuible a los cetemistas sonorenses. En todo caso, quizá no pase mucho tiempo para que los mandos nacionales cetemistas asuman palabra y pongan las cosas en claro.
Por lo demás, no debe perderse de vista que la CTM de la entidad bajo el mando de Javier Villarreal Gámez siempre ha querido mostrar que pueden manejarse por sí solos. Pero no deja de llamar la atención que de un golpe se retire a otro conglomerado, lo cual, a la hora de la hora, debe ser derecho suyo. Habrá que esperar los acontecimientos…
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