Otras variedades de Bathynomus han empezado a comercializarse como comida a un costo alto debido a su sabor similar al de la langosta
Por: Brayam Chávez
Los científicos descubrieron una nueva especie de enorme isópodo, denominada Bathynomus vaderi, que reside en las profundidades del Mar de China Meridional.
De acuerdo con datos de CNN Science, la especie obtuvo su nombre por la analogía de su cabeza con el casco del antagonista Darth Vader de "Star Wars".
Este hallazgo, divulgado en la revista científica ZooKeys, resalta las diferencias estructurales de B. vaderi en comparación con otras especies del género Bathynomus, y subraya la relevancia de profundizar en la investigación de estos singulares crustáceos.
¿QUÉ ES BATHYNOMUS VADERI Y DÓNDE FUE ENCONTRADO?
Vaderi forma parte de la familia isópoda, reconocida por su exoesqueleto robusto y sus siete pares de patas. Esta especie fue reconocida tras ser capturada por pescadores a aproximadamente 50 kilómetros de Quy Nhon, ubicado en la costa sur-central de Vietnam.
Los científicos establecieron que se trata de un supergigante, con dimensiones que llegan a 32.5 centímetros de longitud y un peso superior a 1 kilogramo, situándose como uno de los isópodos más grandes a nivel mundial. Estos animales habitan en el fondo marino, donde se nutren de animales ya muertos, reutilizando nutrientes vitales para el ecosistema de profundidad.
Según la autora del estudio, la Dra. Conni Sidabalok, de la Agencia Nacional de Investigación e Innovación de Indonesia, su gran tamaño podría ser una adaptación evolutiva para subsistir en las profundidades oceánicas.
CARACTERÍSTICAS ÚNICAS DE B. VADERI
La característica más característica de B. vaderi es la forma del segmento final de sus patas posteriores, que se alarga y se inclina levemente hacia atrás. Este aspecto lo distingue de otras especies de isópodos de gran tamaño.
Para confirmar su unicidad, los investigadores examinaron muestras de otras especies del género Bathynomus que se encuentran en museos de diferentes naciones y compararon su ADN. No obstante, la falta de información genética disponible representó un reto extra en el proceso de identificación.