A través de la página "La Herencia delas Viudas", Esmeralda Noriega muestra la rica herencia gastronómica que las mamás de Sonora preservan con amor
Por: Ofelia Fierros
Durante la temporada de frío en Sonora, las mamás sonorenses se convierten en las mejores cocineras, preparando caldos tradicionales que no solo buscan consentir a la familia, sino también preservar las recetas heredadas de generación en generación.
Estos platillos no solo calientan el cuerpo, sino que llenan el hogar de calidez, amor y sabor, características propias de esta región del norte de México.
ESMERALDA NORIEGA, MAMÁ SONORENSE CON GRAN SAZÓN
Al hablar de las mamás sonorenses y los ricos caldos que preparan, el ejemplo claro lo da Esmeralda Noriega, quien, a través de su página de Facebook "La herencia de las viudas", comparte deliciosas recetas, que a más de uno le hacen agua la boca.
La creadora de contenido, originaria de San Pedro dela Cueva, suele cocinar a la leña, y en más de una ocasión nos ha compartido las recetas de sus ricos caldos, que seguramente se te antojarán.
CALDOS PREFERIDOS POR LAS MADRES DE SONORA
Caldo de queso: Uno de los platillos más emblemáticos de la región es el caldo de queso, un manjar que combina la suavidad y el sabor del queso fresco con una mezcla de papas, chile verde.
Es una receta que se disfruta en familia, especialmente durante los días fríos, donde cada cucharada se convierte en un abrazo cálido para el alma.
Cocido: Por otro lado, el cocido es otro de los favoritos, caracterizado el rico sabor de la carne de Sonora, que se cocinan lentamente con verduras frescas, creando un caldo lleno de sabor.
Este platillo no solo es un festín para el paladar, sino también una muestra de la hospitalidad de las mamás sonorenses, quienes siempre se aseguran de que no falte nada en la mesa.
Gallina Pinta: La gallina pinta es otra receta tradicional que no puede faltar en la temporada de frío. Este caldo, que se prepara con carne de res, especialmente cola, así como con maíz y frijol, es ideal para compartir en reuniones familiares y brindar un toque de sabor casero a los días fríos.
Cada bocado de este delicioso manjar es un abrazo al alma, pues tiene el sazón de mamá.
Caldo de pollo: En los hogares sonorenses, el caldo de pollo también ocupa un lugar especial, especialmente en los días en que el cuerpo necesita recargar energías o simplemente reconfortarse.
Este caldo, de preparación sencilla, pero sabrosa, con pollo, arroz y verduras, es uno de los más consumidos en cualquier rincón del estado, pues se cree que tiene propiedades curativas y reparadoras.
Sopa de fideos: La sopa de fideos, aunque más ligera, no deja de ser uno de los platillos más consumidos, especialmente por los niños.
Con su caldo calientito y su toque de sazón, se sirve en muchas mesas como una opción rápida y nutritiva para las tardes frías, acompañada de trozos de pollo o carne, así como con verduras.
Menudo: Con su sabor profundo, ya sea blanco o rojo, se disfruta principalmente los fines de semana y es considerado un remedio para la resaca. En Sonora es más común el menudo blanco, pero no te quedes con las ganas de probarlo rojo, seguramente es una delicia.
Pozole: Este platillo, elaborado con maíz y carne de puerco, es ideal para compartir en fiestas y reuniones familiares.
Cabe destacar que una peculiaridad de las madres de Sonora es que preparan caldos, así sea verano y la temperatura esté a 50 grados centígrados, situación que es motivo de muchos memes en redes sociales.
