Debido al aumento de casos de la enfermedad la Secretaría de Salud mantiene vigilancia en las regiones afectadas
Por: Ofelia Fierros
La Secretaría de Salud (SSa) informó que vigilan 12 municipios de la República Mexicana debido al aumento de casos de lepra.
En su boletín de la Semana Epidemiológica 29, que comprende del 16 al 22 de julio, destacó que en 28 estados se registran 300 casos ya en tratamiento actualmente.
Entre los estados en los que también se ha detectado casos de la enfermedad está Sonora y Sinaloa, informó la SSa.
Sin embargo, los municipios que están registrados con “alta presencia” son Nocupétaro y Nuevo Urecho, en Michoacán; Tuxcacuesco, San Sebastián del Oeste y San Cristóbal de la Barranca, en Jalisco; Tlaltizapan, en Morelos; El Espinal, Santiago Niltepec y San Miguel Chimalapa, en Oaxaca; Lampazos, en Nuevo León; Choix, en Sinaloa, y Tunkas, en Yucatán.
Demás de los estados de Baja California, Coahuila, Colima, Chiapas, Guanajuato, Guerrero, Morelos, Nayarit, Oaxaca, Quintana Roo, San Luis Potosí y Tamaulipas.
¿QUÉ ES LA LEPRA Y CUÁLES SON SUS SÍNTOMAS?
La Secretaría de Salud informó que la lepra está clasificada como enfermedad de alto impacto por la discapacidad que las personas contagiadas pueden desarrollar.
Este padecimiento es causado por dos bacilos: Mycobacterim leprae y Mycobacterum lepomatosis, y su periodo de incubación es de seis meses a 25 años.
La lepra afecta la piel al presentar se manchas descoloridas y también el sistema periférico del cuerpo; aunque se han presentado casos graves que deforman las manos, pies, punta de la nariz y oídos y limita la movilidad de quien la padece.
“En esta enfermedad existen factores genéticos, inmunológicos y sociales como el hacinamiento, contacto intradomiciliario prolongado con personas baciliferas los cuales contribuyen en el desarrollo de la enfermedad, y en ocasiones puede ser sistémica”.
La lepra se contagia de persona a persona, tras una exposición prolongada con alguien contagiado, y es principalmente a través de gotículas expulsadas por la nariz y la boca; sin embargo, no se transmite por tocar los mismos objetos que haya manipulado una persona enferma ni con el contacto con la piel.
Esta enfermedad tiene cura, con un tratamiento que podría durar de seis meses a dos años. En México el acceso al programa para si tratamiento es gratuito y según la Organización Mundial de la Salud (OMS), los pacientes deben ser atendidos sin discriminación ni estigmas.
