“'Soy inocente. Si no fuera mujer, si no fuera un obstáculo, estaría en libertad”, dijo la extitular de la Secretaría de Desarrollo Social
Por: Ofelia Fierros y Jesús Moreno
El juez de control del Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Sur, Ganther Alejandro Villar Ceballos, determinó que la extitular de la Sedesol, Rosario Robles Berlanga, deberá seguir interna en el penal de Santa Martha Acatitla, luego de rechazar su petición para llevar su proceso en prisión domiciliaria.
Robles Berlanga se encuentra presa en el penal femenil desde 2019 por uso indebido del ejercicio público, cuando era titular de la Secretaría de Desarrollo Social.
Villar Ceballos determinó que ni el estado de salud, ni la edad, son procedentes para llevar su juicio en libertad, ya que sus padecimientos pueden ser atendidos por las autoridades penitenciarias.
El magistrado sostuvo que su dictamen no varía de la decisión del juez de control, Felipe de Jesús Delgadillo Padierna, al dictar la prisión preventiva, debido a la contradicción consistente a que Robles Berlanga alegó que se encontraba de vacaciones, mientras su abogado defensor alegó que andaba en un curso.
Alejandro Villar dijo que los aspectos que subsisten en su contra, lo relativo a que no varió la existencia del oficio Cenapi, que señaló que se encontraba en Costa Rica, cuando dijo que no cuenta con recursos; la mención de señalar que solo contaba con un domicilio, cuando en realidad tenía otros; así como el análisis de la posible pena a imponer.
Antes de terminar la audiencia, que duró casi tres horas, Robles Berlanga tomó el micrófono y dijo que esperaba la decisión del juez. “No esperaba otra cosa. He estado sometida y estoy aquí solo porque me llamo Rosario Robles. Y soy inocente”, dijo.
“Entiendo de qué se trata esto. No me han encontrado cuentas en el extranjero ni mi hija tiene una fábrica de chocolates, sé de lo que se trata”, refirió.
Por su parte, su hija, Mariana Moguel, aseguró que le entristece que un juez con la trayectoria de Villar Ceballos se preste a seguir instrucciones de una venganza en contra de su madre, ya que desde el principio ha sido tratada como culpable, violando su presunción de inocencia.