Los empresarios dejen en claro que no se oponen a la reforma pero realizan algunas peticiones al Gobierno mexicano
Por: Luis Valenzuela
Las empresas extranjeras que operan en México expresaron su respaldo a la propuesta de reducir la jornada laboral semanal de 48 a 40 horas, aunque destacaron la necesidad de abordar aspectos como la gradualidad y la flexibilidad en la implementación de la reforma. Erika Quevedo, directora general del Consejo de Empresas Globales (CEEG), enfatizó durante el análisis del impacto de la reforma que dicha medida conlleva un costo económico para las empresas, ya que implica ajustes en estructuras, procesos y programas.
El CEEG, representando a más de 60 empresas multinacionales en México, expresó su apoyo a la reforma, pero planteó cuatro aspectos cruciales para su aplicación:
- Gradualidad en la implementación para facilitar la adaptación progresiva de las empresas.
- Flexibilidad de la norma, considerando las particularidades de cada sector y el tamaño de las compañías.
- Excepciones a la regla para sectores con dinámicas laborales particulares.
- Incentivos que estimulen a las empresas a invertir en más personal.
Quevedo resaltó la importancia de aprender de experiencias internacionales, mencionando los casos de Chile y Colombia, donde la implementación de reducciones de jornada laboral se llevó a cabo en periodos de transición de cinco a ocho años.
La directora del CEEG subrayó que la planificación y la gradualidad son esenciales para que las empresas se adapten de manera efectiva a los cambios propuestos. A pesar de los desafíos económicos, Quevedo afirmó que las empresas globales están abiertas al diálogo y destacó el compromiso con el bienestar de sus empleados mediante programas que incluyen bienestar, bonos, incentivos, horarios flexibles y opciones de trabajo desde casa.
Enfatizando que el camino para la reforma ya está trazado, Quevedo señaló la importancia de una conversación objetiva y sin extremos. Hizo un llamado a todos los sectores involucrados a participar en un diálogo profundo y sin apasionamientos.
La propuesta de reducción de la jornada laboral forma parte de un dictamen aprobado por la Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados, que establece el derecho a dos días de descanso por cada cinco de trabajo. Aunque el proyecto quedó pendiente de votarse en el pleno, se ha convocado a un Parlamento Abierto para escuchar a empleadores, representantes de trabajadores y especialistas. El último foro y la presentación de conclusiones se llevarán a cabo el próximo 13 de noviembre.
EXPERIENCIA INTERNACIONAL EN CAMBIOS DE JORNADA LABORAL
La experiencia internacional, especialmente en países como Ecuador, Chile y Colombia, donde se ha reducido legalmente la jornada laboral, sugiere que la gradualidad, la protección salarial, la flexibilidad en la distribución de horas y la aplicación diferenciada por sectores son elementos clave para el éxito de estas reformas. Además, la Recomendación 116 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) desde 1962 aboga por una reducción gradual de la jornada laboral a 40 horas semanales, proporcionando una guía internacional para implementar cambios sin afectar la economía ni a los trabajadores. Según la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), no hay evidencia de crisis de empleo en los países que han adoptado estas medidas, siempre y cuando se consideren el diálogo social, la flexibilidad y el apoyo a las empresas.
