El presidente López Obrador aclaró que esto no es algo nuevo, sino que tiene que ver con la componenda política que se hizo en el neoliberalismo
Por: Luis Flores
En la mañanera de este viernes 5 de marzo, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), argumentó que se tiene que seguir limpiando de corrupción a los tres órdenes de gobierno, pues afirmó que donde hay más corrupción es en el Poder Judicial Federal.
El mandatario federal afirmó que la corrupción en este poder no es algo nuevo, sino que fue un proceso de degradación y que tuvo que ver con la componenda política que se hizo en el neoliberalismo.
“Hay que seguir limpiando de corrupción al gobierno, a los tres poderes: el Legislativo, el Ejecutivo y el Judicial, y donde hay más corrupción ahora, sobre todo en el ámbito federal, es en el Poder Judicial. Está muy echado a perder", dijo AMLO.
“No es nuevo, fue algo que se fue produciendo, es un proceso de degradación que tuvo que ver con las componendas políticas que se hicieron en la época del llamado neoliberalismo o neoporfirismo en la época de la política de pillaje”, aseguró en conferencia de prensa.
PANORAMA
En la conferencia de prensa se dio a conocer que el exprocurador general de la República, Jesús Murillo Karam, enfrentará su proceso por el caso Ayotzinapa desde su hogar, tras obtener la medida de prisión domiciliaria.
Esta decisión fue tomada por el Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal del Primer Circuito, quien admitió un error en el proceso inicial al negarle esta medida al exfuncionario.
El Tribunal dejó claro que esta medida no implica la libertad de Murillo Karam, sino que redefine el lugar donde enfrentará su proceso, ya que la decisión se basa en que el juez de control consideró que el exprocurador tiene derecho a que la prisión preventiva justificada se ejecute en su domicilio, estableciendo medidas de control para asegurar su cumplimiento.
Según los argumentos presentados, Murillo Karam cumple con los requisitos del artículo 166 del Código Nacional de Procedimientos Penales, que permite la aplicación de la prisión preventiva en domicilio o centro médico para imputados mayores de setenta años o aquejados por una enfermedad grave.