La clave está en una combinación casera de ingredientes que actúan en sinergia para limpiar y suavizar estas preciosas telas
Por: Luis Valenzuela
Las servilletas para tortillas no son solo un complemento en la cocina mexicana; son una tradición, un símbolo de calidez y cuidado en cada comida, sin embargo, su constante uso y exposición al calor y la humedad pueden convertirlas en un caldo de cultivo para bacterias no deseadas.
Por suerte, existe una mezcla mágica que garantiza que estas servilletas permanezcan impecables y suaves, listas para acompañar tus deliciosas tortillas.
La clave está en una combinación casera de ingredientes que actúan en sinergia para limpiar y suavizar estas preciosas telas. Solo necesitas unos pocos elementos que probablemente ya tengas en tu cocina.
Estos ingredientes son agua caliente, vinagre y jabón en polvo para ropa; este último, con su contenido de ácido bórico o bórax, es un aliado poderoso en la lucha contra la suciedad y las bacterias incrustadas en las servilletas.
En tanto que el vinagre y el agua caliente desempeñan el papel de desinfectantes naturales, asegurando que tus servilletas estén libres de gérmenes y suavemente acariciables.
RECETA DE LA MEZCLA MÁGICA:
Ingredientes:
- 2 litros de agua caliente
- 1 taza de vinagre
- 1 taza de jabón en polvo para ropa
Instrucciones:
- En una olla, lleva el agua a ebullición.
- Retira del fuego y agrega el jabón en polvo, mezclando hasta que se disuelva por completo.
- Incorpora el vinagre y sigue mezclando hasta obtener una solución uniforme.
- Sumerge las servilletas en la mezcla y déjalas reposar durante al menos una hora para garantizar una limpieza profunda.
- Lava las servilletas como de costumbre, ya sea a mano o en la lavadora, pero evita el uso de suavizantes para preservar su calidad y evitar que impregnen el aroma en tus tortillas.
Recuerda, para prolongar la vida útil de tus servilletas para tortillas, es crucial no reutilizarlas sin lavarlas previamente.
Este sencillo hábito no solo garantiza la higiene en la mesa, sino que también preserva la frescura y suavidad de estas piezas indispensables en la cocina mexicana.