Alrededor de 200 personas se congregaron en las instalaciones de un hotel donde les serían pagados sus recursos
Por: Redacción
Alrededor de 200 personas se congregaron este miércoles en las instalaciones de un hotel ubicado en la calle Miguel Alemán y Cajeme para exigir el reembolso del costo de los boletos adquiridos para asistir al festival musical Puro Chuky, que se llevaría a cabo el sábado 18 de febrero y fue cancelado por Protección Civil, sin embargo, los empresarios organizadores del evento salieron por la puerta trasera habiendo pagado a sólo unas 15 personas.
Héctor, uno de los ciudadanos afectados, mencionó que es la tercera ocasión que son convocados por los organizadores del evento para devolverles el recurso, y siempre se paga sólo a una cantidad de entre 15 y 20 personas aduciendo que “se terminó el dinero”, lo que les afecta pues la mayoría trabajan o tienen otras actividades que están descuidando por acudir con la esperanza de recuperar lo que es suyo.
"Originalmente, mediante la página oficial del Festival Puro Chuly se informó que se les pagaría todos los miércoles del mes de mayo; después se les convocó para junio, y esta vez igualmente, sólo se entregó el recurso a unos 15 inconformes, lo que hace que se pierda la confianza en este tipo de eventos", expresó el entrevistado.
Los boletos para el festival tuvieron costos diversos, desde los 250 hasta los mil 700 pesos; a decir de las personas congregadas en el lugar, había varias que acudieron por el reembolso de los boletos más caros.
Fernando, uno de los pocos ciudadanos a los que le reembolsaron su dinero, dijo que su boleto era de mil 700 pesos, pero realmente costó 79 pesos más, como cargo por servicio del banco, al haber pagado con tarjeta; el joven reveló que al recibir su recurso de vuelta, le descontaron el 10 por ciento, desconociendo el motivo.
Alan, Bertha y David, consideraron que los empresarios están faltando a su palabra, pues los convocan pero no les pagan, y estimaron que quizá están esperando que los ciudadanos pierdan por cansancio, dejando de reclamar lo que es suyo.
El empresario, quien se negó a proporcionar su nombre y pidió no ser grabado, declinó hablar sobre el incumplimiento de que se le acusa por parte de los afectados, y sólo mencionó que están en la mejor disposición de devolver su dinero a la gente.
Al final, ante el arremolinamiento de las personas molestas, algunas desmayadas por el fuerte calor, el empresario salió por la puerta trasera del hotel, llevando consigo el dinero.
