La ONG Naturaleza y Cultura México informó que todavía quedan alrededor de 75 mil hectáreas de esa zona, por lo que buscarán protegerlas
Por: Raúl Armenta Rincón
Alrededor de 40 mil hectáreas del Bosque Pitayal más denso del mundo, ubicado en Huatabampo, Navojoa y Álamos, han sido talados en los últimos 30 años con fines agrícolas, ganaderos y otros, por lo que se busca crear un Área Natural Protegida en el 2025.
Miguel Ángel Ayala Mata, director de la organización no gubernamental Naturaleza y Cultura México, informó que todavía quedan alrededor de 75 mil hectáreas de esa zona, que es necesario proteger mediante diversos esquemas de conservación.
Para ello, anunció, en octubre se realizará una consulta en las comunidades de esa área, quienes votarán a favor o en contra sobre el proyecto, que es promovido por el Gobierno del Estado, a través de la Comisión de Ecología y Desarrollo Sustentable, y por dicha ONG.
Lamentó que sea el hombre quien atente, como en este caso, contra su propio medio ambiente, pero también ha incidido la falta de un adecuado marco normativo y de sanciones más estrictas a quienes dañan la ecología.
Ayala Mata dijo que esperan obtener el llamado estudio previo justificativo, que es el documento que requiere el Gobierno del Estado para validar el proyecto y elaborar el decreto de Reserva.
“Confiamos en que tendremos resultados positivos, pero será el Gobierno quien decida, en base a la aceptación y consenso de las comunidades”, añadió.
Asimismo, destacó la importancia de proteger el bosque, porque no solamente se trata de pitayas, sino de una rica y extensa flora y fauna, además de fuente de vida para muchos poblados y un atractivo destino turístico.
“También el Pitayal tiene una gran riqueza cultural al ser parte del territorio de los Yoreme Mayo, donde, más que una planta, es una tradición, una parte vital de sus costumbres, por sus usos gastronómicos, medicinales y simbólicos”, agregó.
“Es muy importante crear una ANP, para preservar un invaluable patrimonio natural y cultural”, dijo Miguel Ángel Ayala.