Aunque la formación de ciclones tropicales ha estado por detrás del promedio para esta época, la fuerza de los sistemas ha superado las expectativas
Por: César Omar Leyva
Históricamente septiembre es el mes de la temporada de huracanes en el que se presentan más de estos fenómenos afectando a diferentes zonas del México. A 10 semanas de que la temporada termine, el pronóstico que se hizo al inicio, está un tanto lejos de cumplirse.
Aunque la formación de ciclones tropicales ha estado por detrás del promedio para esta época, la fuerza de los sistemas ha superado las expectativas.
A pesar de que las proyecciones promedio para septiembre sugieren la formación de seis sistemas con nombre, dos huracanes y ninguna tormenta mayor, la temporada 2024 ha registrado cinco tormentas con nombre, tres huracanes y una tormenta mayor.
La actividad en la cuenca del Atlántico es la única que ha superado el promedio global este año, mientras que otras regiones han visto una disminución de actividad entre el 30% y el 50%.
Las temperaturas del agua, que se mantienen muy por encima del promedio, no han sido suficientes para provocar un aumento significativo de la actividad debido a la falta de otros factores como la humedad y la presión atmosférica baja.
Con 10 semanas restantes en la temporada, que se extiende hasta el 30 de noviembre, las proyecciones iniciales que esperaban entre 20 y 30 tormentas con nombre parecen cada vez más difíciles de cumplir.
Históricamente, la mayor cantidad de ciclones que se ha producido después del 1 de septiembre ocurrió en 2020, con 15 tormentas con nombre. Sin embargo, la temporada 2024 tendría que promediar 1 a 2 nuevas tormentas con nombre por semana para acercarse a las proyecciones más altas.
LA INFLUENCIA DEL CAMBIO CLIMÁTICO
Expertos consideran que el cambio climático pudiera estar influyendo más de lo que se reconoce en las proyecciones meteorológicas.
Otras investigaciones han demostrado una disminución notoria en el número de huracanes y en la Energía Ciclónica Acumulada (ACE) a nivel global.
La reducción de la actividad ciclónica no es única en el Atlántico, sino que se ha observado en todas las cuencas a nivel mundial. Esto ha llevado a algunos expertos a considerar que el cambio climático podría estar influyendo más de lo que se reconoce en las proyecciones meteorológicas.
Investigaciones previas han mostrado una disminución significativa en el número de huracanes y en la Energía Ciclónica Acumulada (ACE) a nivel global, especialmente en el Pacífico Norte occidental, aunque también se ha notado un aumento en los daños relacionados con ciclones y en los eventos de intensificación rápida.
De acuerdo al Servicio Meteorológico Nacional (SMN) el país recibe de 4 a 5 ciclones en promedio cada año y a pesar de las proyecciones no es posible saber el momento y el lugar de impacto, por lo que se debe esperar hasta observar la evolución del fenómeno.
RECOMENDACIONES A QUIENES VIVEN EN ZONA EXPUESTA A CICLONES
Ante la presentación de una posible contingencia por llegada de un huracán o tormenta fuerte las autoridades recomiendan lo siguiente.
- Hacer un plan familiar de protección civil, para que en caso de que se requiera hacer una evacuación puedas contar con varias opciones
- Tener una mochila de emergencia. Si ya la tienes, es importante revisar la caducidad de los alimentos y medicamentos, así como asegurar los documentos importantes dentro de una bolsa de plástico hermética y contar con un respaldo electrónico (USB o en un correo electrónico). No olvides considerar a tus mascotas
- Infórmate sobre los avisos del Sistema de Alerta Temprana para Ciclones Tropicales (SIAT-CT)
- Si tienes un seguro es importante que revises la cobertura, así como la vigencia del mismo
