Si eres de las personas que suele llevar siempre a su mascota arriba de su vehículo, ¡presta atención!, aquí te decimos las consecuencias
Por: Luis Flores
Como cualquier ser vivo, los perros necesitan cuidados especiales y ciertas medidas de protección para que no se estresen a bordo del vehículo. Y lo mismo sucede en recorridos pequeños, por ejemplo, al realizar una visita al veterinario.
Sin embargo, algunos propietarios ignoran por completo la manera correcta para transportar a sus mascotas y corren el riesgo de ser multados. Aquí te explicamos cómo llevar a tu perro en el auto.
¿DE CUÁNTO ES LA MULTA POR LLEVAR A TU PERRO EN EL CARRO?
El Artículo 38 de la Ley de Protección y Bienestar de los Animales de la Ciudad de México prohíbe transportar objetos, personas o animales que obstruyan la vista del conducto y le impidan realizar movimientos con los brazos.
Ya sea que lo transportes en la parte trasera o en el asiento del copiloto, tu lomito podría ponerte en peligro detrás del volante o ser una distracción para ti. En ese sentido, el Artículo 30 de la misma ley señala:
- Toda persona tutora responsable o encargada de un perro está obligada a colocarle una correa al transitar con él en la vía pública.
- Otros animales de compañía deberán transitar sujetados o transportados apropiadamente de acuerdo a su especie.
- Las personas tutoras responsables de cualquier animal tienen la responsabilidad de los daños que le ocasione a terceros y de los perjuicios que ocasione, si lo abandona o permite que transiten libremente en la vía pública.
Teniendo en cuenta dicha información, el valor de la multa por transportar a tu mascota sin los cuidados necesarios podría ser de 10 a 20 veces la Unidad de Medida y Actualización (UMA), es decir entre mil 374 y dos mil 174 pesos.
¿CÓMO SE DEBE TRANSPORTAR UN PERRO EN EL CARRO?
Si el perro es de raza pequeña lo mejor es acomodarlo en una jaula transportadora. Debemos asegurarnos que la jaula sea de material rígido y lo suficientemente grande para que tu mascota pueda estirarse e ir cómoda en el camino. Además, tiene que estar asegurada en el piso detrás del conductor.
En cambio, si tu amigo peludo pesa más de 10 kilos puede viajar en el asiento trasero siempre y cuando porte un arnés de seguridad, que no lo lastime o le genere ansiedad.