El comprar un vehículo a ciegas es la peor inversión que podrías hacer en tu vida, sobre todo tratándose de un auto que tendrás durante varios años
Por: Luis Flores
Si por tu mente pasa el comprar un auto usado hay algunas cosas que debes hacer para asegurarte de que tanto la maquinaria como su estructura y elementos estén en buen estado, pues de lo contrario solo comprarías decepciones, pues terminarás pagando más en reparaciones que lo que te costó el coche.
Aunque en la parte de los documentos hay algunas cosas que debes verificar para que no vayas a adquirir problemas con las autoridades, tanto la marca de aceites y lubricantes automotrices Bardahl como la plataforma de venta Kavak destacan la importancia de realizar una revisión visual y física del vehículo que adquirirás.
PUNTOS A REVISAR EN UN AUTO USADO
Comprar a ciegas es lo peor que podrías hacer, sobre todo tratándose de un auto que tendrás durante varios años, del que dependerás para tu movilidad y que no te saldrá en cualquier cosa, por lo que es imprescindible que lo revises antes de cerrar el trato, lo que idealmente deberás hacer enfocándote en los siguientes seis aspectos:
Motor
Lo primero que debes hacer es abrir el cofre y revisar el compartimiento del motor en busca de aceite o de algún líquido, además de cualquier rotura en las mangueras o bandas. Así también descubrirás si alguna pieza fue remplazada y ya no es la original, por lo que podría ser de menor calidad.
Una vez estando ahí, revisa que el aceite, el refrigerante, los frenos y de la dirección se encuentren en buen nivel y que sobre todo el aceite no se vea oscuro o grueso, pues indicaría que no lo cambiaban seguido, lo que pudo repercutir en la lubricación del motor.
Carrocería
Siempre debes estar pendiente de cualquier marca en la carrocería que te indicará tanto el estado de la pintura, sobre todo si el auto no ha tenido un buen mantenimiento y si ha sido lavado con frecuencia; también la presencia de curvaturas, raspones o acabados rugosos denotan que éste ha tenido reparaciones.
Modificaciones
Ya sea que le cambiaron algo para mejorar su desempeño, o porque estuvo en un accidente, es posible que la estructura tenga afectaciones, por lo que se recomienda que en caso de encontrar modificaciones en el auto, pidas los recibos de las mismas.
Arcos de llantas
Una carrocería chueca o los ejes mal alineados impiden que el auto sea conducido de la forma en que debería, lo que a su vez provocaría derrapes que afectarán de manera diferente cada llanta, lo que se notará en el desgaste irregular entre cada una
Sin embargo, mientras lo más fácil sería revisar los neumáticos para ver su desgaste, muchos vendedores los cambian para ocultar estos detalles y poderlo vender. Ante ello, un consejo es que cheques en su lugar las bahías de las llantas, donde podrías ver residuos de hule atrapados en las partes superior y trasera.
Interiores
Jamás olvides hacer una inspección minuciosa al interior del vehículo, que te hablará del mantenimiento que le han dado, así como el uso que tuvo con sus dueños anteriores.
Checa que los asientos no tengan decoloraciones, manchas, marcas o algún rastro de derrame de líquidos. Sobre todo, que las vestiduras no tengan olor a cigarro o a humedad.
Parte baja
Revisa la parte que está debajo del vehículo, con una inspección básica bajo el motor para ver que no haya escurrimientos de aceite o del líquido refrigerante, que podrías encontrar fácilmente en la parte del pavimento que queda bajo el motor, pues no es buena señal que las tenga, ya que de entrada tendrás que pagar por algunas reparaciones.
Por último verifica que la bandeja del piso o el tanque de gasolina no tengan abolladuras o raspones, pues esto es señal de algún incidente previo que podría traerte problemas más adelante.