El cantante fue blanco de una ataque armado ocurrido la tarde del martes 7 de febrero en la fronteriza ciudad de Tijuana
Por: Luis Valenzuela
Trágicamente, la vida y carrera del joven cantante Chuy Montana llegaron a un abrupto final el 7 de febrero en Tijuana, Baja California, cuando fue encontrado sin vida a un costado de la carretera libre Tijuana-Playas de Rosarito.
Con tan solo 25 años de edad, Montana se había destacado como una de las nuevas promesas del género de los corridos bélicos en México, un nicho musical que mezcla la narrativa de la vida en las calles con temas de violencia y narcotráfico.
Su ascenso meteórico en la escena musical regional mexicana comenzó en 2023, cuando fue descubierto por Jesús Ortiz Paz, líder de Fuerza Regida, y firmado por Street Mob Record. Con este sello, lanzó dos exitosos temas, "Porte de Scarface" y "Qué bendición", cuyos videos oficiales superaron los 13 millones de reproducciones en You Tube. A estos le siguieron sencillos como "Empresa SM", "Marlboro blanco" e "Italia", esta última una colaboración con Ismael CM.
Sin embargo, el camino hacia el éxito no fue fácil para Montana, ya que creció en las calles de Tijuana, donde se familiarizó con una cultura marcada por la búsqueda de riqueza y el uso de armas de fuego.
Esta influencia se reflejaba tanto en su música como en su vida personal, en donde las redes sociales se convirtieron en una plataforma para exhibir su gusto por los rifles de asalto, las pistolas, los autos lujosos y la vida nocturna.
El tema "Porte de Scarface", su primer gran éxito comercial, encapsulaba perfectamente esta estética, haciendo referencia a la película de 1983 dirigida por Brian de Palma y protagonizada por Al Pacino.
En la canción, Montana retrata a un personaje que atraviesa la frontera en busca del sueño americano, dispuesto a todo por alcanzar la opulencia y el reconocimiento.
Pero detrás de esta fachada de éxito y glamour, la violencia acechaba; a casi 24 horas de su asesinato, las autoridades de Baja California aún no han emitido un comunicado oficial sobre las líneas de investigación que siguen para esclarecer el caso.
Mientras tanto, figuras como Jesús Ortiz Paz han lamentado públicamente la muerte de Montana, compartiendo recuerdos de momentos compartidos en fiestas y eventos, donde el joven cantante deleitaba a sus amigos con sus interpretaciones de corridos bélicos.
El trágico final de Chuy Montana deja un vacío en la escena musical regional mexicana y pone de relieve los peligros que enfrentan aquellos que se sumergen en un mundo marcado por la violencia y el narcotráfico.
Su legado, sin embargo, perdurará a través de su música, que seguirá resonando en los corazones de sus seguidores y recordándonos la complejidad de la vida en las calles de México.