En el próximo año, los pensionados registrados en el Instituto Mexicano del Seguro Social tendrán un ajuste anual en sus pensiones
Por: Brayam Chávez
Los pensionados del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) a partir del 2025 podrían tener un incremento significativo en su monto de las pensiones, siendo esta una oportunidad que surge después de una resolución emitida por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), la cual plantea ajustes en la ley 73 de la pensión IMSS, los cuales impactarán directamente a los pagos que corresponden a los jubilados.
En la actualidad, la cantidad de las pensiones del IMSS se modifica conforme al salario mínimo. No obstante, a partir del año próximo, el aumento ya no se vinculará con este indicador, sino con la inflación registrada en la nación, lo que implica una modificación significativa en la estrategia de actualización.
¿CUÁNTO SERÁ EL AUMENTO QUE RECIBIRÁN LOS PENSIONADOS EL 2025?
La Ley 73, que rige las pensiones para los empleados que ingresaron al IMSS previo al 1 de julio de 1997, sufrirá una alteración en su estructura de actualización. Esto favorecería principalmente a los retirados bajo el sistema de la pensión mínima garantizada, que, de acuerdo con las autoridades, podrían obtener un incremento de hasta el 12 por ciento en su salario mensual.
Claudia Sheinbaum, quien es la presidenta de México actualmente, fue quien adelantó esta medida al afirmar que el incremento propuesto para el salario mínimo del 2025 beneficiaría directamente a los pensionados del IMSS.
"Nuestro objetivo es que el salario mínimo llegue a equivaler a 2.5 canastas básicas, cuando actualmente está en 1.6". Esto significaría un aumento de alrededor del 12 por ciento en 2025.
Eso fue lo que señalaron explicando el ajuste que impactaría a los beneficiarios de la pensión IMSS bajo el régimen mínimo garantizado.
¿CUÁLES SERÁN LOS REQUISITOS PARA LA LEY 73 DEL IMSS?
La ley 73, que regula las pensiones del IMSS para los empleados afiliados antes de 1997, define dos clases principales de pensión: por ancianidad y por jubilación. La pensión de jubilación se concede a partir de los 65 años y la cantidad de la pensión se incrementa progresivamente a medida que la edad progresa, llegando al 100 por ciento a los 65 años.
En cambio, la pensión por cesantía está diseñada para aquellos que se retiran entre los 60 y los 64 años, con un porcentaje que decrece con el avance de la edad, llegando al 75 por ciento a los 60.