Un grupo de 20 sicarios perpetró el ataque contra el fundador de los autodefensas y sus escoltas
Por: Luis Valenzuela
El fundador del grupo de autodefensas en la región de Tierra Caliente, Hipólito Mora, fue cobardemente asesinado el pasado 29 de junio en un ataque en el que participaron al menos 20 sicarios que dispararon cerca mil balazos para acabar con su vida y la de 3 de sus escoltas.
Eran las 8:00 horas de ese trágico día cuando Mora salió del pueblo para recorrer sus parcelas de limón, las cuales se localizan a unos 6 kilómetros, media hora más tarde una base de operaciones de la Guardia Nacional, Sedena y Guardia Civil que se encontraba a 11 calles donde fue atacado el líder de los autodefensas se retiró de la cancha donde operaba.
Alrededor de las 9:00 de la mañana, Guadalupe, hermano de Hipólito, le hizo una llamada para advertirle sobre la presencia de tres camionetas con hombres armados que recorrían el pueblo.
Hipólito Mora continúo con sus labores y pasadas de las 11:30 horas llamó a su domicilio y luego de esto fue emboscado por el comando armado cuando se dirigía a su casa.
La emboscada a Hipólito Mora
En el cruce de las calles Hiquingae y Fray Diego de Basalenque, de La Ruana, Michoacán fue donde se perpetró el ataque contra el fundador de los autodefensas de la región de Tierra Caliente en donde 20 sicarios dispararon al menos en mil ocasiones con armas de grueso calibre y también usaron granadas de fragmentación.
Hipólito viajaba en una camioneta con blindaje nivel 5, el cual no soporto el fuerte embate de los fusiles Barrett calibre .50mm, que es tan potente que atravesó la seguridad del vehículo.
En l lugar del ataque se recolectaron casquillos de diferentes calibres, todos de armas de poder como casquillos 7.62×39, tipo AK-47 mejor conocido "Cuerno de chivo"; .223 tipo AR-15 y G-3; además del calibre .50 antes mencionado.
Según detallaron, al ataque duró al menos 30 minutos y las autoridades no llegaron al sitio; durante la agresión armada también se detonaron granadas de fragmentación que provocaron que se incendiara la camioneta de Hipólito.
Al encontrarse en la camioneta envuelta en llamas, Mora tuvo que salir para tratar de salvarse y en ese momento recibió un balazo en la cabeza, muriendo al instante; se dice que parte de su cuerpo iba en llamas cuando abandonó el vehículo.
Escoltas repelieron agresión
Los agentes que acompañaban al fundador de los autodefensas trataron de repeler la agresión, sin embargo, se vieron superados por la cantidad de sicarios y el armamento que portaban.
Tras realizar las necropsias a los cuerpos, se encontró que uno de los escoltas recibió tres impactos de bala en la cabeza, y después de muerto los atacantes le prendieron fuego; otro de los agentes presentaba dos balazos y al tercer policía le dieron un tiro en la cabeza.
El blindaje de la camioneta ofrecía una seguridad para un ataque de armas largas a una distancia de 7 centímetros entre los impactos, pero el bestial ataque fue tanto que no se pudo evitar la muerte del exlíder de las autodefensas a manos del crimen organizado.
