El instituto le hace saber a los trabajadores que tienen a disposición un crédito por vía nómina
Por: Luis Flores
El regreso a clases está a la 'vuelta de la esquina', es por ello que la mayoría de padres de familia se encuentran preocupados porque no cuentan con los recursos suficientes para cubrir ese gasto.
Muchos de ellos han optado por pedir prestado a un conocido, empeñan algún artículo de valor, o se endeudan en con bancos financieros que les cobran intereses muy altos.
Ante esta problemática, el Instituto del Fondo Nacional para el Consumo de los Trabajadores (Fonacot), les recordó a los usuarios que tienen a su disposición los créditos de nómina de fácil acceso y con buenas condiciones del mercado: Crédito en Efectivo y Crédito Mujer Efectivo.
Este financiamiento autorizado, cuyo monto máximo es el equivalente a cuatro veces el salario mensual del trabajador o trabajadora, se deposita directamente en la cuenta bancaria del solicitante y los descuentos se aplican en sus recibos de nómina.
PARA PODER SOLICITARLO
Entre los requisitos que se deben cumplir están: ser mayor de edad, contar con una antigüedad de empleo mínima de seis meses, laborar en un centro de trabajo afiliado al Fonacot, proporcionar un número celular para llamada de validación en el momento, tener dos referencias personales y correo electrónico personal.
En el caso del Crédito en Efectivo, el Fonacot explica que las tasas de este financiamiento son preferenciales con plazos de pago de seis, 12, 18, 24 y 30 meses, el cual le brinda al trabajador solicitante liquidez inmediata para utilizarla, por ejemplo, en la compra de útiles y uniformes.
En tanto, para las madres trabajadoras el Crédito Mujer Efectivo ofrece una tasa de interés preferencial ubicada entre el 8.9 y 16.27 por ciento, sin cobro de comisión por apertura, de modo que su costo es menor a otros que se ofrecen en el mercado.
El Fonacot enfatizó que ambos productos crediticios se tramitan de forma fácil, gratuita y sin intermediarios, y se convierten en una buena alternativa para hacer frente a los gastos de regreso a clases sin comprometer sus finanzas o sobreendeudarse.