Este es el tiempo recomendado para poder transitar con una llanta de refacción

Algunos vehículos llevan en el maletero delantero o sujeto debajo de la carrocería un neumático extra, para así evitar riesgos innecesarios

Por: Marcela Islas

Si alguna vez te has quedado varado por un neumático ponchado, la llanta de refacción puede ser tu salvavidas en estos casos, pero ¿sabes cuánto tiempo puedes conducir con ella? A continuación, te lo explicamos.

Por lo general, la llanta de refacción se encuentra en la cajuela. Sin embargo, algunos vehículos la llevan en el maletero delantero o sujeta debajo de la carrocería. Utilizarla adecuadamente te permitirá llegar a un lugar seguro para reparar o reemplazar la llanta dañada y evitar riesgos innecesarios.

TIPOS DE LLANTA

La llanta de refacción es un elemento esencial en cualquier vehículo, pero su uso debe ser temporal. Primeramente, debes saber que existen dos tipos principales de llantas de refacción:

  • De tamaño completo: Son idénticas a las llantas regulares y pueden usarse de manera normal hasta que puedas reparar o reemplazar la dañada.
  • Temporales o "donuts": Son más pequeñas y ligeras, diseñadas para un uso limitado.

¿CUÁNTO ES EL TIEMPO EN QUE PUEDES USARLA?

Lo más recomendable es que la velocidad no exceda los 80 kilómetros por hora, en una distancia que no supere los 100 kilómetros. Asimismo, se debe evitar manejar en condiciones adversas como lluvia o carreteras mojadas.

Las razones por las que no se aconseja el uso extendido de la llanta de refacción son variadas, entre las cuales destacan:

  • Las llantas temporales tienen una banda de rodadura más delgada y son menos duraderas.
  • Su diseño afecta la adherencia del vehículo al pavimento, especialmente en condiciones húmedas.
  • Su tamaño más pequeño puede afectar el equilibrio del vehículo y la eficiencia del combustible.

CONSEJOS

  • Verifica la presión y asegúrate de que la llanta esté inflada a la presión correcta.
  • Maneja con precaución, evita maniobras bruscas y mantén una velocidad constante.
  • Reemplaza la llanta dañada lo antes posible.
  • No abuses de la llanta de refacción.
  • Respeta los límites de velocidad y distancia.

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