La Diócesis de Ciudad Obregón invita a cambiar sus trajes de monstruos por disfraces de Santos
Por: Javier Zepeda
Contrarrestar el impacto de Halloween en los niños es lo que busca la Diócesis de Ciudad Obregón, por lo cual se afinan detalles en algunas parroquias para que se puedan llevar a cabo pequeños concursos de disfraces pero con temática de Santos.
El Padre Rolando Caballero Navarro, vocero de la Diócesis, recordó que la Iglesia Católica invita a las familias a no celebrar el Halloween, pues además de que no es una costumbre de origen mexicano, se trata de un reconocimiento al mal y puede llegar a representar un peligro para la integridad de las personas.
“La Iglesia Católica se pronuncia en contra de esta costumbre que no tiene realmente un ambiente cristiano, sino que es un reconocimiento al mal en sí. Es una festividad que lamentablemente se quiere inculcar a muchos niños. Consideramos que no es lo ideal y no es una costumbre mexicana siquiera”, comentó.
Dijo que, en caso de que alguna parroquia lleve a cabo esta actividad, será esta la que lo informe a los fieles, pero adelantó que en una de ellas ya hay cerca de 25 niños listos para disfrazarse en representación de algún Santo.
Caballero Navarro también dijo que incluso hay una agrupación cristiana que se encuentra viendo la posibilidad de preparar un evento más grande el 31 de octubre, para ayudar a contrarrestar el impacto del Halloween.
“Se está queriendo preparar un evento más grande, que en cierta manera va a contrarrestar que se festeje al mal. Es algo que prepara una agrupación cristiana y se analiza con algunos colegios. Debemos reconocer que tenemos un Dios verdadero, que nos protege, nos cuida y merece todo nuestro reconocimiento”, dijo.
El vocero de la Diócesis de Ciudad Obregón agregó que, por su parte, la Pastoral Juvenil trabaja permanentemente en llevar actividades sanas a los jóvenes, con lo que se busca que crezcan espiritualmente y se alejen de todo aquello que represente un riesgo para su fe o su integridad .
Hizo un llamado, para que los jóvenes no lleven a cabo actividades riesgosas por mera atracción a lo paranormal o lo desconocido.
En años anteriores, se han realizado concursos de disfraces de Santos en parroquias de la Diócesis, como es el caso de la parroquia Sagrado Corazón de Jesús, ubicada en Nueva Esperanza.