A la hora de comprar productos, es importante que las personas sepan qué consumen y por qué podrían empeorar si tienen el padecimiento
Por: Edel Osuna
Desde que entró en vigor la NOM-0251, es obligatorio para los fabricantes etiquetar los productos alimenticios para que indiquen tanto su valor calórico, como de azúcares, pues la diabetes sigue siendo una enfermedad con mucha presencia en México; además hay personas que desconocen qué alimento quizá estén consumiendo y los haga subir de peso, exponiéndolos al padecimiento.
Por ello es de suma importancia que los consumidores estén informados sobre la diabetes y qué tipo de alimentos no deben consumir para no disparar la enfermedad por azúcares añadidos y grasas poco saludables.
DIABETES, EL MAL SILENCIOSO
Conocido como el mal silencioso, la diabetes es una enfermedad que afecta a millones de personas en todo el mundo; recientemente, una investigación realizada en Reino Unido destacó que el consumo de ciertos alimentos podrían detonar la enfermedad, al grado de que podría desarrollarse la tipo 2.
Por ello, es de suma importancia que quienes sufren la enfermedad conozcan qué comer y qué no, para tener hábitos saludables y evitar el padecimiento.
LOS RESULTADOS DEL ESTUDIO SOBRE HÁBITOS
De acuerdo con la información, el estudio fue realizado por la University College Londo y publicado en The Lancet Regional Health Europe; en él se analizaron los hábitos alimenticios de más de 312 mil personas por espacio de 11 años.
El resultado fue sorprendente, pues demostró que quienes ingieren grandes cantidades de alimentos ultraprocesados tienen un 17 por ciento más de probabilidad de sufrir de diabetes tipo 2; es decir, aproximadamente 15 mil casos en el lapso del estudio.
Entre los alientos ultraprocesados que los diabéticos NO deben consumir están los snacks salados, las carnes procesadas, las comidas preparadas y las bebidas azucaradas.
De acuerdo con la investigación, estos alimentos tiene alto contenido de azúcares añadidos, conservadores y grasas saturadas; en otras palabras, están hechos para agradar al paladar sin importar el impacto en la salud.
No obstante, el consumo de estos productos por largo tiempo trae severas consecuencias en la salud, pues dañan el pancreas, provocan inflamación crónica y, por consecuencia, eleva el nivel de azúcar en sangre, comprometiendo la regulación adecuada de la insulina.
En cuanto a las bebidas azucaradas, el estudio arrojó que esta son preocupantes, pues refrescos, jugos y otros artículos con gran cantidad de azúcar representan un 40 por ciento de la ingesta diaria de quienes están en riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.
Al consumirlos con frecuencia, provocan picos inmediatos de glucose y contribuye a una inflamación constante, derivando en más problemas de salud, como cardiacos y hepáticos.
Finalmente, se recomendó a quienes padecen diabetes que lleven una dieta saludable, rica en frutas, verduras, granos enteros y proteínas magras.