Las autoridades han confiscado, además de combustible, armas, dinero en efectivo y documentos relacionados con actividades ilegales
Por: César Omar Leyva
A pesar de que empresarios gasolineros se comprometieron con la presidenta Claudia Sheinbaum a mantener el precio del combustible con un tope máximo de 24 pesos por litro, el gobierno ha detectado un creciente mercado negro de gasolina principalmente en estados de la frontera con Estados Unidos.
Rafael Marín Mollinedo, titular de la Agencia Nacional de Aduanas de México (ANAM), informó sobre los decomisos de más de 50 pipas en la mencionada región del país.
El fenómeno, dijo, ocurre a pesar de que la región cuenta con precios más bajos debido al decreto de zona libre. Las autoridades han confiscado, además de combustible, armas, dinero en efectivo y documentos relacionados con actividades ilegales.
PREOCUPACIÓN POR COMBUSTIBLES FUERA DE LA LEY
De acuerdo a información de Elfinanciero.com el mercado negro de la gasolina preocupa a la industria, especialmente por la venta de combustible que es de origen desconocido, no tiene regulación y por ende podría estar adulterado o no ser cien por ciento lo que se dice que es.
La Organización Nacional de Expendedores de Petróleo (Onexpo) advirtió que estos productos pueden afectar la seguridad del transporte, dañar motores y maquinaria, además de generar costos adicionales para empresas y consumidores.
RIESGO ECONÓMICO
Además de evadir impuestos y regulaciones, estos combustibles representan un riesgo económico y de seguridad. La Onexpo ha insistido en la necesidad de reforzar las medidas de control para evitar distorsiones en el mercado y proteger a los consumidores.
El gobierno mexicano informó que continúa con operativos en la frontera para frenar este comercio ilícito, mientras el sector gasolinero pide mayor vigilancia para garantizar la calidad y legalidad del combustible en el país.
