En la actualidad, los estafadores utilizan los datos personales para perpetrar delitos como el secuestro virtual, por lo que es fundamental conocer las señales que indican una llamada de extorsión. A pesar de los esfuerzos de autoridades y expertos por educar al público, persisten las dudas sobre cómo detectar estos intentos de fraude.
¿CÓMO IDENTIFICAR UNA LLAMA DE EXTORSIÓN?
Estas son algunas claves para identificar y prevenir la extorsión telefónica.
- Número Privado: Si se recibe una llamada de un número desconocido, especialmente si es privado, considera no contestar.
- Llamadas repetidas: Los extorsionadores suelen ser persistentes, llamando varias veces para aumentar la presión sobre la víctima. Frecuentemente, se hacen pasar por autoridades o miembros del crimen organizado.
- Amenazas: El lenguaje amenazante es una característica común de las llamadas de extorsión. Los delincuentes buscan intimidar tanto a la persona contactada como a sus familiares.
- Cambio de dispositivo: Inicialmente, la llamada puede provenir de un teléfono fijo, pero los extorsionadores buscan trasladar la comunicación a un celular para dificultar su rastreo.
- Exceso de Diálogo: Los estafadores pueden intentar ganarse la confianza de la víctima proporcionando información falsa sobre su identidad, posición y acciones.
¿CÓMO PREVENIR ESTAS LLAMADAS?
Para evitar convertirse en víctima de extorsión, es importante seguir algunas recomendaciones clave:
- No proporcionar información personal: Nunca divulgar información personal tuya ni de tu familia por teléfono, especialmente en situaciones de extorsión.
- Mantener contacto: Estar en constante comunicación con personas cercanas puede ayudar a detectar intentos de fraude y brindar apoyo en caso de emergencia.
Al estar alerta a estas señales y seguir estas precauciones, se puede reducir significativamente el riesgo de caer en una trampa de extorsión telefónica. Ante cualquier sospecha, es importante mantener la calma y reportar la situación a las autoridades pertinentes. La prevención y la educación son herramientas clave en la lucha contra el crimen telefónico.