El reciente fallecimiento de la política mexicana ha dejado una vacante importante de la presidencia de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados
El pasado sábado 5 de octubre, la política mexicana se vistió de luto con la muerte de Ifigenia Martínez y Hernández, a los 94 años. Reconocida como una de las figuras más emblemáticas de la izquierda en el país y pionera en la defensa de los derechos políticos de las mujeres, su legado perdurará en la memoria colectiva. Sin embargo, su deceso ha dejado una vacante importante de la presidencia de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados.
Ifigenia Martínez había asumido la presidencia en la sesión constitutiva del 29 de agosto, y su liderazgo estaba programado para el primer año de la LXVI Legislatura. Junto a ella, los vicepresidentes, Sergio Gutiérrez Luna (Morena), Kenia López Rabadán (PAN) y María del Carmen Pinete Vargas (PVEM), también tomaron sus puestos en un entorno legislativo que, a partir de ahora, deberá reestructurarse.
¿CÓMO ELEGIRÁN PARA LA PRESIDENCIA DE LA MESA DIRECTIVA TRAS LA MUERTE DE IFIGENIA MARTÍNEZ?
La Ley Orgánica del Congreso General, en su artículo 19, estipula que la elección de los integrantes de la Mesa Directiva se llevará a cabo mediante el voto de las dos terceras partes de los diputados. Ante este panorama, el presidente de la Junta de Coordinación Política, Ricardo Monreal Ávila, ha señalado que, aunque hay vicepresidentes que pueden asumir temporalmente, es necesario realizar un ejercicio interno para decidir quién ocupará la presidencia de forma definitiva.
"El vicepresidente asume la Presidencia, pero se emite un acuerdo de la Junta de Coordinación Política, y ese acuerdo se somete al Pleno", explicó Monreal.
Entre las posibles sucesoras de Martínez se encuentra Olga Sánchez Cordero, quien ha expresado su deseo de que una mujer lidere el recinto legislativo. En declaraciones a medios, recordó que, al inicio de la legislatura, había considerado postularse, pero decidió ceder el espacio a Ifigenia en apoyo a su deseo de entregar la banda presidencial a Claudia Sheinbaum.
Por su parte, Dolores Padierna, otra figura destacada dentro del grupo parlamentario de Morena, también ha manifestado su interés en presidir la Mesa Directiva.
La decisión de quién ocupará la silla vacía de Ifigenia Martínez será un momento clave en la historia reciente de la Cámara de Diputados, y el proceso se desarrollará en un contexto donde se busca mantener el legado de inclusión y representación que Martínez promovió a lo largo de su vida. Con la mirada atenta de sus colegas y la ciudadanía, el futuro presidente de la Mesa Directiva deberá estar a la altura del reto que implica liderar el Congreso en estos tiempos de cambio y expectativa.
