Mientras investigaban unos documentos, un grupo de expertos encontraron túneles y laberintos debajo de lo que fue por un tiempo una iglesia en México
Por: Brayam Chávez
Gracias a los estudios de la arqueología, a la sociedad se le ha permitido conocer a mayor profundidad las civilizaciones que habitaron alguna vez nuestro planeta y gracias a eso reconstruir su modo de vida, su sociedad, su economía, así como su organización política y religiosa, entre otras cosas.
Esta vez los expertos han encontrado una serie de túneles y laberintos debajo de un palacio católico en Mitla, y algo curioso es que Mitla viene de la palabra náhuatl Mictlán que significa "el inframundo". En la actualidad es una zona arqueológica ubicada en Oaxaca, México y se dice que en el lugar se alcanzó una población de 10 mil habitantes en la época prehispánica.
¿CÓMO FUE EL DESCUBRIMIENTO?
Cuando el equipo investigaba unos documentos donde se describían unos laberintos bajo tierra justo en las ruinas de un palacio de Mitla, los expertos usaron tecnología de punta para no arriesgar las estructuras, ya que no había una entrada debido a que los misioneros la sellaron porque se creía que era una entrada al inframundo.
Los arqueólogos tuvieron que hacer uso de un radar de penetración terrestre para detectar objetos subterráneos a través de ondas electromagnéticas y haciendo uso de la tomografía de resistividad eléctrica lograron evaluar las propiedades eléctricas del subsuelo y, para finalizar, usaron la tomografía de refracción de ruido sísmico para medir la velocidad de propagación de ondas sísmicas.
Para finalizar, se utilizó un modelo en 3D para replicar a la perfección el interior de las cámaras, y gracias a los métodos antes mencionados, lograron confirmar la presencia de cámaras subterráneas, túneles y pruebas de la construcción del palacio de las columnas, tumbas y estructuras arqueológicas enterradas.
LA HISTORIA DETRÁS DEL RECINTO
En 1674, el sacerdote Francisco de Burgoa dejó prueba de su visita en dichas ruinas de la ciudad Zapoteca, la cual se encuentra en la actual Oaxaca. Según el equipo de investigación, Burgoa describió un impresionante templo, el cual constaba de cuatro cámaras interconectadas, siendo la última de ellas poseedora de una puerta de piedra que daba acceso a una profunda caverna.