Aunque la dependencia señala que el ciberataque no provocó “una afectación mayor”, hay voces que hablan de un intento de extorsión
En la Comisión Nacional del Agua (Conagua) hay dos que tres rezando para que el ataque cibernético contra esa dependencia no pase a mayores y pronto se puedan conocer filtraciones de lo que en su servidor se alberga. Si bien la dependencia aseguró ya que el ciberataque no provocó “una afectación mayor a los sistemas de información administrativa”, hay voces del interior de Conagua que hablan de un intento de extorsión por no divulgar contenidos comprometedores. Así como sucedió con Guacamayas, se filtró que los ciberdelincuentes están pidiendo cierta cantidad para que todo lo captado del servidor de la dependencia del agua siga seguro y nadie salga “raspado” con información sobre obras mal adjudicadas, presupuestos desviados y otras linduras de la corrupción a la cual la llamada 4T no ha podido ser ajena. Según la información obtenida, “el ataque habría sido perpetrado con ransomware mediante un virus denominado “Blackbite” que encripta y secuestra la información de un servidor. Los grupos de hackers dedicados a este tipo de ciberataques, posteriormente piden ‘rescates’ por la citada información”. Ahí se las dejo, a ver cuántos funcionarios van a estar dispuestos a aportar de su bolsillo para pagar el rescate de la información antes de que comiencen a divulgarse sus prietitos en el arroz.REGALAZO A INDÍGENAS
En pleno Decenio Internacional de las Lenguas Indígenas 2022–2032, los pueblos originarios de México han recibido un gran regalo:
La Cámara de Diputados recibió la Iniciativa presidencial por medio de la cual se reforman, adicionan y derogan diversas disposiciones en materia de simplificación orgánica, que implicaría incluso la desaparición del Instituto Nacional de Lenguas Indígenas (Inali).
Según comentaron miembros de la Tribu Yaqui, ese organismo, creado hace unos 20 años, ha sido puesto en vías de extinción y con ello sus labores de fortalecimiento, preservación y desarrollo de las lenguas indígenas.
Cuando muchas lenguas originarias están a punto de desaparecer, se viene un nuevo golpe de la sinrazón hacia un organismo que tiene mucho aún por dar, a diferencia de los dirigentes del Instituto Nacional Indigenista que, mediante corrupción de autoridades tradicionales, amenazas a los disidentes y opacidad en las obras públicas, han venido imponiendo unos planes de Justicia que si bien trae mejoras comunitarias, el costo social es muy alto.
Por eso los indígenas reclaman que la iniciativa presidencial enviada va contra el principio de progresividad “que obliga al Estado Mexicano a garantizar la no regresividad en el reconocimiento de los derechos humanos; máxime si la Constitución Federal reconoce en su artículo segundo, la obligación del Estado para establecer las instituciones que permitan garantizar la vigencia de los derechos de los indígenas y su desarrollo integral”.
PLEITO MILITAR
Y hablando de filtraciones, el Pentágono ya tenía en sus archivos la información de que en México las secretarías de Defensa Nacional y la de Marina no se pueden ver ni en pintura.
“Según lo asentado en los documentos clasificados, la rivalidad está ocasionada por el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador, quien planea asignarle más tareas a la Sedena, lo que ha despertado preocupación dentro de la Semar”, señalan las versiones periodísticas.
Y es que, como ya se sabe, el presidente de la República pidió a la Sedena ejercer la supervisión y el control de la aviación civil, lo cual obviamente implica que tomaría el control del espacio aéreo y eso no fue del agrado del Almirante José Rafael Ojeda Durán, titular de la Marina.
Por supuesto que este tipo de roces entre los mandos militares causan que a la postre la labor en contra de la delincuencia no alcance las metas deseadas porque las operaciones conjuntas de esas dependencias se realizan con el normal recelo entre sus integrantes, lo cual al final de cuentas se refleja en magros resultados.
UNA GESTIÓN
Pues todavía no se concreta su instalación y el gobernador Alfonso Durazo Montaño ya anda gestionando que los recursos derivados de las plantas solares, a instalarse en Sonora se vaya directito al subsidio del consumo en cada hogar sonorense.
Según da cuenta un comunicado del gobierno sonorense, “el mandatario estatal indicó que gestionará ante el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, que parte de los beneficios que se tendrán con las plantas fotovoltaicas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), que se instalarán en Sonora, sean destinados para concretar los recursos para este apoyo anual.
“Propongo al presidente que, de los beneficios que tendrá la planta de Puerto Peñasco, o las otras plantas, que nos corresponda de manera automática una parte de ese beneficio para garantizar por la vida útil de la planta, cuando menos, una cantidad equivalente al subsidio; voy a insistir en ese planteamiento”.
Pues una de cal por las que van de arena y a hacer changuitos para que esta gestión se concrete. Claro, primero hay que tener las plantas en operación.
