En un mundo cada vez más digitalizado, las interacciones diarias se ven afectadas; la salud al dormir es primordial de acuerdo a expertos
Por: Araceli Rodríguez
Un nuevo estudio reveló que el uso de redes sociales no solo afecta la salud mental durante el día, sino que también puede alterar la calidad del sueño y provocar pesadillas.
La investigación realizada por la Universidad Flinders de Australia, sugiere que pasar tiempo en plataformas como TikTok, Instagram, X (anteriormente Twitter) y Facebook incrementa el riesgo de pesadillas vinculadas a experiencias negativas vividas en línea.
El estudio, dirigido por el psicólogo Reza Shabahang, se centra en cómo las redes sociales pueden inducir sueños perturbadores. "Descubrimos que los individuos que pasan más tiempo en las plataformas durante su vida de vigilia, son más propensos a experimentar pesadillas ", afirmó Shabahang.
¿CON QUÉ SUEÑAN?
Entre las temáticas recurrentes de estas pesadillas están los conflictos con otros usuarios, la ansiedad por no poder acceder a la cuenta personal y la angustia generada por noticias inquietantes o comparaciones sociales.
Shelby Harris, psicóloga clínica del Albert Einstein College of Medicine, señala que el contenido visto en redes (desde ciberacoso hasta tensiones políticas), genera una angustia emocional que puede manifestarse en pesadillas.
Este hallazgo se suma a la creciente evidencia de que el uso excesivo de redes sociales tiene un impacto negativo en la salud mental, incluyendo un aumento de la depresión, el aislamiento social y el riesgo de ciberacoso.
IMPACTO EN LA SALUD DEL SUEÑO
El estudio de Flinders no sólo explora el vínculo entre las redes sociales y las pesadillas, sino que también profundiza en el deterioro general del sueño.
Asad Khan, bioestadístico de la Universidad de Queensland, destaca que los usuarios frecuentes de redes sociales reportaron una menor calidad de sueño, más interrupciones y una mayor ansiedad nocturna.
Otros estudios apoyan esta relación, mostrando que el "miedo a perderse algo" (FOMO, por sus siglas en inglés), puede intensificar el estrés y dificultar el descanso.
El impacto va más allá de las pesadillas. Anthony Levasseur, investigador del sueño en el Centro de Investigación Avanzada en Medicina del Sueño de Montreal, explicó que el tiempo excesivo frente a pantallas está asociado con problemas de sueño en adolescentes y adultos.
Estos dispositivos no solo mantienen despiertos a los usuarios, sino que la luz azul que emiten inhibe la producción de melatonina, una hormona clave para inducir el sueño.
¿CÓMO COMBATIR EL INSOMNIO DIGITAL?
Los expertos coinciden en que para mejorar la calidad del sueño es fundamental limitar el uso de redes sociales antes de dormir. Lauren Hale, investigadora de la Universidad Stony Brook, sugiere que los padres establezcan límites en el uso de pantallas y fomenten hábitos saludables para el sueño en sus hijos.
"Es importante evitar el contenido muy estimulante antes de dormir y dejar los teléfonos fuera de la habitación", recomendó.
Además, Maida Lynn Chen, experta en trastornos pediátricos del sueño, advirtió que las notificaciones y alertas continuas interrumpen el sueño. La sobreexposición a contenido visual y auditivo de alta intensidad también contribuye a que el cerebro permanezca en estado de alerta, impidiendo un descanso adecuado.
El problema de fondo radica en que muchas personas ya duermen menos de lo recomendado. Según datos recientes, el 20 por ciento de la población duerme menos de cinco horas diarias, y más del 50 por ciento no alcanza las siete horas de sueño que los expertos consideran necesarias.
La falta crónica de sueño aumenta el riesgo de enfermedades como la depresión, la ansiedad, trastornos metabólicos e incluso problemas cardiovasculares y neurodegenerativos.