Es la primera vez que se aplica la pena capital a una mujer originaria de México; dejará 14 hijos en la orfandad
Por: Edel Osuna
Desde que en 2008, Melissa Lucio, de 53 años de edad,, fue sentenciada a la pena capital en Texas por la muerte de su hija, Mariah, tiene las horas contadas, y al parecer terminarán el 27 de abril de este 2022, cuando le sea cumplida la condena. Ella es una mujer de origen mexicano y será la primera mexicana ejecutada en Texas.
Su situación derivó cuando, el 17 de febrero de 2007, durante una mudanza a su nuevo hogar, su hija de dos años de edad, que entonces era la más pequeña y la 12 en el orden de nacimientos, se cayó por las escaleras.
Pensando que las heridas de Mariah no eran serias, a los dos días comenzó a reflejar falta de apetito y cansancio, y la menor murió en su nueva casa.
Asustados, los papás de la menor llamaron a emergencias, y paramédicos llevaron de urgencia al hospital, pero cuando llegó ya había muerto.
A raíz de ello fue detenida y enjuiciada; sin embargo, de acuerdo con sus abogados, la pequeña sufría de una discapacidad leve en los pies, los cuales apuntaban hacia un lado, por lo que solía tropezarse con frecuencia, pero no había sufrido de caídas.
Sin embargo, el fiscal dijo que Melissa había golpeado a la menor, pues la nena tenía moretes en el cuerpo, una herida en la cabeza y un brazo roto, que no había sido atendido sino hasta que llegó al nosocomio.
Durante todo el juicio, Melissa ha sostenido su inocencia, además de que sus familiares señalan que presentaron pruebas médicas falsas, además de que la afligida mujer fue obligada a confesar el supuesto crimen.
Tras ser declarada culpable, Melissa Lucio fue sentenciada a muerte por inyección letal, misma que será ejecutada este 27 de abril.
Si llega a cumplirse, ella será la primera mujer mexicana ejecutada en Texas, en tanto, ella no ha parado de recibir las visitas de sus hijos en prisión, pero conforme más se aproxima la fecha fatal, sus lágrimas no paran de correr.
PIDEN CLEMENCIA
Sin embargo, en un afán de que no le sea cumplida la sentencia, sus abogados interpusieron la solicitud de clemencia; no pide indulto, sino conmutación de pena por una menor o, al menos, la suspensión de 120 días de la ejecución, en lo que intentan un juicio nuevo.