Estos pequeños papeles pueden parecer insignificantes, pero contienen información confidencial y valiosa para los dueños de las cuentas
Por: Marcela Islas
En esta temporada con el pago del aguinaldo y las compras para la celebración de Navidad, es más común que acudamos a los cajeros automáticos a retirar efectivo. Sin embargo, debemos tener cuidado con los pequeños detalles que pueden poner en riesgo nuestra seguridad financiera.
Uno de ellos son los recibos que se imprimen al realizar una transacción, que pueden parecer insignificantes, pero este pequeño papel contiene información valiosa que en manos equivocadas sería utilizada para cometer fraudes.
Los recibos de los cajeros automáticos, a pesar de parecer inofensivos, contienen información confidencial que puede ser utilizada por delincuentes para cometer fraudes. Estos pequeños papeles, que a menudo desechamos sin pensarlo dos veces, pueden convertirse en una puerta de entrada a nuestras cuentas bancarias.
¿CUÁLES SON LOS RIESGOS?
Los recibos de los cajeros automáticos suelen incluir datos como:
- Número de cuenta. Esencial para identificar al titular de la cuenta.
- Fecha y hora de la transacción. Permite rastrear la actividad reciente de la cuenta.
- Monto de la transacción. Revela el saldo disponible en la cuenta.
- Código de autorización. Un número único que verifica la autenticidad de la transacción.
Esta información, en manos equivocadas, puede ser utilizada para distintas prácticas ilícitas como:
- Suplantar la identidad, ya que los delincuentes pueden utilizar estos datos para hacerse pasar por ti y realizar compras fraudulentas.
- Realizar transferencias no autorizadas con el número de cuenta y otros datos, o pueden transferir dinero a cuentas falsas.
- Solicitar información adicional al ponerse en contacto por teléfono o correo electrónico, haciéndose pasar por tu banco y solicitar información confidencial para completar sus estafas.
¿CÓMO PROTEGER TU INFORMACIÓN?
- Destruye los recibos: Nunca tires los recibos a la basura sin antes destruirlos. Utiliza una trituradora de papel o rómpelos en pedazos pequeños.
- Guarda los recibos en un lugar seguro: Si necesitas conservar un recibo por algún motivo, guárdalo en un lugar seguro y fuera del alcance de otras personas.
- Verifica tus estados de cuenta: Revisa regularmente tus estados de cuenta bancarios para detectar cualquier actividad sospechosa.
- No compartas información personal: Evita compartir tus datos bancarios con personas que no conozcas o con sitios web que no sean seguros.
- Instala un software antivirus: Protege tu computadora y dispositivos móviles con un buen software antivirus para evitar que los delincuentes accedan a tu información.