El conferencista estuvo hoy en Ciudad Obregón para hablar de cómo ha enfrentando con valentía la discapacidad con la que nació
Por: Ana Jusaino
No tener brazos y piernas podría ser un obstáculo para el ciudadano común, pero para Rafael Reyes Velasco, no hay imposibles, sino retos por superar, pues ha logrado especializarse en las Ingenierías de Biomédica, Audio y Música.
Su actitud ante la vida anterior ha servido como fuente de admiración e inspiración de muchos, por esta razón comparte su testimonio de vida en una conferencia titulara "Mi experiencia desde la discapacidad", la cual impartió esta noche en el teatro del Itson.
A sus 42 años Rafa se sigue considerando un joven de corazón, siempre accesible, sonriente de buen ánimo. Acompañado de su inseparable patineta todo terreno, ha aprendido a vivir y a adaptar su vida a un mundo que todavía no aprende a integrar totalmente a las personas con discapacidad.
“A toda la gente le digo que realmente no hay límite que te detenga para alcanzar tus sueños, incluso la misma humanidad nos lo ha demostrado. En algún momento el límite era el cielo y de pronto llegaron unos locos y dijeron: - yo quiero llegar a la luna y ahorita el ser humano está en el espacio”, expresó el colombiano, que desde los 2 años de edad radica en la Ciudad de México.
Rafa, platicó que cuando estaba en el vientre de su madre, sufrieron un accidente en motocicleta en los primeros meses de embarazo y al realizarles varias radiografías, recibieron gran cantidad de radiación, lo que se cree que afectó al desarrollo de sus extremidades.
“Mi condición es de nacimiento y si ha sido complicado en muchas situaciones, pero lo que yo siempre digo es que toda parte difícil en la vida de las personas es un reto, yo veo todo como un reto y los retos te ayudan a ser mejor persona, cuando superas un reto te hace mejor persona, desarrollas mucha creatividad, descubres cosas en ti, que tal vez no sabías que existían y eso te ayuda más adelante a alcanzar sueños”,
Reyes Velasco, recordó que como toda persona desde muy pequeño ha tenido experiencias limitantes en donde quienes están a su alrededor no han creído en él; sin embargo, su resiliencia, perseverancia, responsabilidad y amor propio le han valido para salir adelante y lograr lo que para muchos puede ser imposible.