El impreso estableció los cimientos del periodismo en la región con el Heraldo del Yaqui, que estuvo nutrido de destacados colaboradores
Por: Oviel Sosa
La información fluye a un ritmo vertiginoso por la inmediatez que dictan las redes sociales, pero en el pasado, el proceso se basada en métodos donde se empleaban más los recursos tangibles, lo que convertían al papel, la tinta y la pesada maquinaria en el motor de la información de interés público que circulaba en la sociedad.
En Ciudad Obregón la primera imprenta que se estableció fue La Gaceta del Pacífico. fundada en el año de 1928 e instalada en la calle Sonora, entre No Reelección y Guerrero, en lo que era el edificio Esquer que a los años fue demolido.
Su propietario era el lituano Leo Rosenfeld. Al estallar la “Rebelión Escobarista” comandada por el general José Gonzalo Escobar, quien desconocía el gobierno de Emilio Portes Gil, nombrado como Presidente de la República, el rotativo abanderó las ideas del movimiento que buscaba derrocar al mandatario nacional.
TROPAS FEDERALES FRENAN LA INFORMACIÓN
Tras el bombardeo que se registró en Cajeme en abril de 1929 por parte de aviones federales que buscaban aniquilar a integrantes de la “rebelión” que se encontraban en territorio Yaqui, Leo Rosefeld fue detenido y desterrado. Con ello el primer rotativo de Obregón se extinguió.
Sin embargo dicho impreso estableció los cimientos del periodismo en la región que nutrieron a las plumas que después saltaron a escena.
SURGE EL HERALDO DEL YAQUI
Al vencer las fuerzas federales a los integrantes de la “rebelión escobarista” en mayo de 1929, Leo Rosenfeld regresó en el mes de junio con mayor brío a Ciudad Obregón con la misión de seguir creando un canal de comunicación dirigido a las masas.
En los vestigios que dejó la Gaceta del Pacífico, opacada y frenada por el gobierno federal, levantó el primer periódico del municipio de Cajeme, el cual nació bajo el nombre del Heraldo del Yaqui.
El rotativo surgió en 1929 con 43 años de vida al desaparecer en 1972. El impreso se caracterizó por nutrir sus páginas de información basada en enaltecer a la clase política, al ser en su mayoría a lo largo de la historia del Heraldo del Yaqui, funcionarios públicos con puestos influyentes los dueños de la editorial.
CAMBIA DE SEDE
A finales de la década de los treinta, el Heraldo del Yaqui cambió de sede y se mudó a la esquina sur poniente de las calles Sinaloa y Nicolás Bravo, ahí permaneció hasta que dejó de salir al público dejando una huella en la historia, al ser el primer periódico de Ciudad Obregón.
De los pioneros que pasaron por sus instalaciones se encuentra el fallecido Manuel Mexía Alvarado, personaje que fue de los primeros redactores que tuvo el rotativo, el cual estampó su firma, pasión y estilo y quien por años fungió como el cronista oficial del municipio de Cajeme por su sapiencia, investigaciones y aportaciones que realizó a la sociedad sonorense.
De esta manera, la primera imprenta de Ciudad Obregón estuvo ligada al surgimiento del primer periódico de Cajeme, lo que paradójicamente lo separó de su línea editorial fue que la Gaceta del Pacifico cuestionaba en sus escritos al gobierno federal, algo que después sucumbió ante el recurso que inyectaba la clase política que estuvo por muchos años al frente del impreso Heraldo del Yaqui, que lo transformó en un medio encaminado a promover las acciones llevadas a cabo por el gobierno estatal.
