Las emociones de quienes están en rehabilitación salen a flor de piel, pues confundir la ansiedad los pone vulnerables ante la tentación
Por: Ana Jusaino
Diciembre es un factor de riesgo, indicó Abraham Almada Ortega, terapeuta especializado en adicciones, ya que es el tiempo durante el cual se remueven las emociones de quienes se encuentran en confinamiento para desintoxicarse de su adicción a las drogas.
El director de la Clínica Especializada Amadeo resaltó que las personas en recuperación entran en una etapa de ansiedad y que, si no aprenden a canalizar ese trastorno, se confunde con la necesidad de consumir droga, por lo que la persona puede llegar a recaer.
“Estas fechas se trabaja como un factor de riesgo, porque llega un momento en que consumen, sin ganas de consumir; porque tienen ansiedad de otra cosa. Y más en estas fechas, pues los muchachos que tienen mucho tiempo sin ver a sus hijos, sin pareja o sufren el fallecimiento de un familiar, en estas fechas se detona su ansiedad”, lamentó.
Sin embargo, señaló que cuentan con diversas técnicas de cohesión familiar, las cuales a través de mensajes hacia sus familiares y el apoyo de sus allegados pueden salir adelante.
“Buscamos que a través de esa técnica, ellos crean un plan, para la próxima Navidad se proponen no estar encerrados recibiendo un tratamiento residencial, se hace un plan de contención, basado en la prevención de recaídas en la cual trabajan con las personas afectivas (familia) y las redes de apoyo”, destacó.
Actualmente, la Clínica Amadeo tiene una matrícula de 40 internos, todos hombres y pueden recibir a personas de 16 años hasta menores de 60 años de edad.
