El hombre dijo que a diario hace lo que puede para darle a su bebé la mayor cantidad de recuerdos posibles, y planea disfrutar al máximo cada día
Por: Edel Osuna
Mientras las nuevas generaciones se niegan a tener hijos, un hombre de 83 años de edad acaba de convertirse en padre, y lo único que lamenta es que no podrá ver a su hijo crecer.
El protagonista de la historia es el originario de Argentina, Alberto Cormillot, quien procreó a su bebé con su esposa Estefanía Pasquini, de 35 años.
De acuerdo con el hombre, que aunque no verá a su hijo desarrollarse, trata de aprovechar y disfrutar al máximo cada día, a fin de dejarle la mayor cantidad de recuerdos posible.
Médico de profesión, especializado en nutrición, Cormillot y su mujer comenzaron a planear el futuro de su pequeño.
Por ello, contrató a un maestro privado chino, para que su niño aprenda el idioma oriental, al que se refiere como la "lengua del futuro".
Para que la mujer lograra concebir, la pareja recurrió a un tratamiento de fertilidad, pues en 2012, a Alberto le fue diagnosticado cáncer de colon, por lo que con una cirugía le fue retirado un tumor.
Y aunque el hombre tienen poco más de 8 décadas de existencia y a que tiene dos hijos adultos, Renee y Adrián, así como tres nietas, está firmemente involucrado en criar a su bebé
“Soy consciente de que la vida no es infinita. Ese pequeño está aquí y lo voy a acompañar hasta cierto momento. No dramatizo demasiado las cosas, solo registro la realidad de la vida”, puntualizó.
