Masashi Kishimoto, el célebre creador de Naruto, ha abierto su corazón en una reciente entrevista, revelando los desafíos más duros que enfrentó durante los años de serialización del exitoso manga.
Si bien su obra es considerada un ícono global del anime y manga, su desarrollo estuvo marcado por un constante sufrimiento físico que casi le impide continuar.
LA CARGA INVISIBLE DE CREAR UN CLÁSICO
Durante una conversación recuperada por el usuario UzuRepo y difundida por BorutoOricon, Kishimoto confesó que su mayor obstáculo no fue la historia ni el diseño de personajes, sino el desgaste que implicaba mantener el ritmo de publicación semanal.
"Más que el contenido en sí, lo más desafiante fue mi condición física durante la producción", explicó.
El mangaka admitió que no tiene una salud particularmente fuerte, lo que le dificultaba cumplir con los exigentes plazos. "Siempre trabajaba en un estado físico bastante limitado", señaló, revelando que muchas veces se sentía sobrepasado por el esfuerzo requerido para mantener viva la historia de Naruto semana tras semana.
DOLOR Y PERSEVERANCIA EN CADA PÁGINA
Kishimoto también reflexionó sobre cómo este desgaste influyó en la narrativa misma del manga: "En la obra, la lucha contra el dolor es fundamental. Abordé una cuestión difícil y me costó encontrar la manera de resolverla". A pesar de las adversidades, el autor logró completar Naruto con éxito, concluyendo la serie en el volumen 72 tras años de emociones, batallas épicas y momentos inolvidables para millones de fans.
El legado continúa con supervisión de cerca
Actualmente, Masashi Kishimoto se mantiene involucrado en el universo ninja como supervisor de Boruto: Two Blue Vortex, la secuela que sigue a los hijos de los protagonistas originales. Aunque ahora el dibujo y la escritura están a cargo de Mikio Ikemoto, Kishimoto revisa cada detalle para asegurar la fidelidad y calidad del proyecto.
Mientras tanto, los fans del anime esperan el regreso de Boruto a la televisión, con el estudio Pierrot prometiendo una nueva etapa con mucho menos relleno, algo que ha sido una constante petición de la comunidad.
