La Clave Única de Registro de Población (CURP) biométrica aún no ha entrado en vigor de manera obligatoria a nivel nacional en México; sin embargo, está en fase de pruebas en Veracruz, pero su implementación será gradual a partir de 2025, pero aún sin fecha específica.
Ahora bien, tampoco tiene carácter obligatorio, informó la Secretaría de Gobernación (Segob), ni está condicionada a otros trámites; no obstante, se espera que sean obligatoria para antes de que finalice el sexenio de la actual presidenta Claudia Sheinbaum.
Por otra parte, se recomienda estar atento a los comunicados oficiales de las autoridades para conocer fechas y procedimientos para su implementación en las diferentes entidades de la República Mexicana.
Sin embargo, en esta cuestión, esto es lo que dice la Inteligencia Artificial (IA) respecto a la implementación obligatoria de la CURP biométrica.
¿HAY RIESGOS CON LA CURP BIOMÉTRICA?

Aunque la implementación de la CURP biométrica en México aún no tiene carácter obligatorio, esta ha generado un debate significativo sobre los posibles riesgos que podrían representar.
Al respecto, diversas organizaciones civiles, expertos en derechos digitales y especialistas han expresado su preocupación por las implicaciones de esta nueva forma de identificación.
Entre los riesgos potenciales están:
- Vigilancia masiva: La creación de una base de datos centralizada con datos biométricos (huellas dactilares, reconocimiento facial, escaneo de iris) de toda la población, incluyendo menores de edad, podría facilitar la vigilancia masiva por parte del gobierno; además, la obligatoriedad de utilizar la CURP biométrica para cualquier trámite público o privado limitaría la libertad de negarse a proporcionar estos datos sensibles.
- Vulneración de información sensible: Los datos biométricos son únicos e insustituibles. Una vulnerabilidad de la base de datos donde estos se almacenan tendría consecuencias permanentes y difíciles de remediar, exponiendo a las personas a la suplantación de identidad y otros fraudes. La falta de un organismo autónomo como el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) para supervisar el manejo de estos datos aumenta el riesgo de mal uso.
- Exclusión social: La identificación biométrica podría dificultar la identificación de ciertos grupos de la población, cuyas características físicas pueden cambiar, como adultos mayores, personas con discapacidad o personas que realizan trabajos manuales intensos. Esto podría generar exclusión en el acceso a servicios básicos si la CURP biométrica es obligatoria.
- Riesgos en la búsqueda de personas desaparecidas: Si bien se argumenta que la CURP biométrica facilitará la búsqueda de personas desaparecidas, colectivos de familiares señalan que esta medida no aborda las causas de las desapariciones y que existen otras leyes y mecanismos ya establecidos para la búsqueda. Existe la preocupación de que se utilice el dolor de las familias para justificar una política de control y vigilancia.
- Posible uso indebido: Existe el riesgo de que la información biométrica sea utilizada para fines distintos a la identificación, como seguimiento y monitoreo de líderes sociales, periodistas y activistas. La conexión de la Plataforma Única de Identidad con diversas bases de datos (financieros, transporte, salud, telecomunicaciones) podría generar perfiles detallados de los ciudadanos, afectando su privacidad.
- Seguridad de la información: No está claro si las instituciones encargadas de la gestión de la CURP biométrica contarán con la capacidad técnica para proteger la información de posibles ataques cibernéticos y para investigar vulnerabilidades en caso de ocurrir.
LOS PRO DE LA CURP BIOMÉTRICA
Por otra parte, al ser de carácter obligatorio y manejada por las autoridades, podría favorecerse la seguridad, ya que con la CURP biométrica aumentará la seguridad, dificultará el robo de identidad y la falsificación de documentos.
Además, los trámites podrían agilizarse, pues con la verificación de identidad a través de datos biométricos facilitaría las gestiones administrativas.
En contraparte, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ha advertido sobre el peligro que representa la recopilación masiva de información biométrica, ya que se le considera una grave intromisión a la privacidad, por lo que se considera que este proyecto debería reevaluarse a fin de resguardar la seguridad y derechos humanos de los mexicanos.