Es tan grande su compromiso, que hasta le regala las medicinas a los pacientes
Por: Edel Osuna
La humildad para reconocer el origen de cada persona es lo que hace grande al ser humano, y Edson Fernández es muestra de ello.
El joven originario de Alvarado, Veracruz, recientemente se graduó como médico cirujano, pero antes de partir le prometió a su madre que, tras graduarse, regresaría a su pueblo para ayudar a la gente; tan extraordinario es así, que, incluso, les regala las medicinas a sus pacientes.
"Hace algunos años, antes intentar entrar a mi carrera, le prometí a mi Poder Superior que, de ser aceptado y tener éxito en mis estudios, haría campañas de salud en el pueblo de mi mamá, un pueblo pesquero con difícil acceso a un sistema de salud".
Y le cumplió a la autora de sus días, pues ahora, con mucho entusiasmo y con el corazón lleno, aterriza la promesa que le hiciera y la cual espera crecer y llegar mucho más lejos.
