Los perros son más sensibles al ruido y gatos a los destellos de luz; para que la pirotecnia no te agarre con la guardia baja, checa estos consejos
Por: Edel Osuna
Muchas personas aman a sus mascotas, pero las fiestas de fin de año se vuelven un calvario tanto para ellas, como para sus animalitos, pues el estruendo de la pirotecnia, como los destellos de las luces generan ansiedad en perros y gatos.
Y pese a que las autoridades motivan a la población a no usar fuegos artificiales para despedir el Año Viejo y recibir al Nuevo, la gente sigue con esta egoísta tradición.
Sin embargo, empresas especializadas en cuidado y alimentación animal brindan consejos para que en la Noche Vieja tus animales pasen los estallidos y flashazos lo más tranquilos posibles.
PARA LOS PERROS
En el caso del considerado mejor amigo del hombre, se recomienda aplicar el método llamado "Tellington Touch", que consiste en vendar estratégicamente a la mascota, que debe ir acompañada de toques en círculos con los dedos, lo que les brindará un sentido de protección y relajamiento ante los estruendos. También puede aplicarse en caballos y gatos.
Otra opción es compartir tiempo con él, jugar y correr antes de la tronadera, lo que bajará considerablemente su nivel de ansiedad.
Podría, bajo la supervisión de un profesional, darle un tranquilizante, así como un juguete, para que desvíe su atención y canalice su estrés.
En caso de que el perro se quede solo en casa, no debe estar amarrado, pero podría encerrarlo en un espacio reducido, para que al oír los ruidos no salga corriendo.
También es recomendable ponerles música clásica, que resulta benéfica para disminuir su nivel de ansiedad.
PARA LOS GATOS
En caso de que tengas felinos, es bueno crearle un escondite dentro de la casa, relajante y seguro, como una caja de cartón, con una frazada al lado, con buena cantidad de luz.
Checa con el veterinario se le pueden administrar hormonas o feromonas, a fin de disminuir su miedo.
En caso de que lo dejes en casa, cierra perfectamente puertas y ventanas, para que no escape si el animal se llega a alterar, a fin de que no se pierda.
Si no podemos evitar que las personas, egoístamente, prendan fuegos artificiales en la vía pública, al menos brindaremos a las mascotas un espacio en que se sienta protegido y tranquilo.
