Durante la temporada de Pascua, los productos de chocolate inundan los estantes de los supermercados. Pero, detrás de esta abundancia se esconde una realidad alarmante: el cambio climático está amenazando seriamente la producción mundial de cacao, el ingrediente principal del chocolate.
Las sequías prolongadas, lluvias torrenciales, plagas y temperaturas extremas están reduciendo las cosechas y provocando un aumento significativo en los precios.
Según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), los eventos climáticos extremos (como incendios, tormentas intensas y escasez de agua) están haciendo que muchas regiones sean cada vez menos aptas para el cultivo de cacao.
Esta planta, que necesita un clima cálido y húmedo, está sufriendo las consecuencias del calentamiento global, especialmente en África occidental, donde se produce alrededor del 70% del cacao mundial.
MÁS TIEMPO CON TEMPERATURAS ALTAS
Un informe reciente de Climate Central reveló que, entre 2015 y 2024, el cambio climático añadió al menos tres semanas adicionales con temperaturas por encima de los 32 °C durante la temporada principal de cultivo en Costa de Marfil y Ghana.
Estos picos de calor no solo afectan la cantidad y calidad del cacao, sino también la salud y productividad de los agricultores.
Además, las lluvias excesivas y las sequías severas complican aún más el panorama. La falta de agua puede limitar la floración de las plantas, mientras que la lluvia intensa puede inundar los campos, impedir la absorción de oxígeno por las raíces y fomentar enfermedades como la pudrición negra del cacao.
Ghana y Costa de Marfil, por ejemplo, enfrentaron en 2023 un brote de enfermedades fúngicas tras lluvias fuera de temporada.

ASÍ HA AUMENTADO EL PRECIO DEL CACAO
Todo esto se traduce en un cacao más caro. De acuerdo con datos de la Naciones Unidas para el comercio y desarrollo, el precio del cacao aumentó un 136 por ciento entre julio de 2022 y febrero de 2024. La baja oferta, combinada con la alta demanda estacional, genera una escalada de precios que ya se refleja en los productos de chocolate.
Expertos de la Plataforma Suiza para el Cacao Sostenible (swissco) indican que la adaptación al cambio climático es urgente para garantizar la sostenibilidad de este sector. Es necesario fortalecer la resiliencia de los sistemas agrícolas y proteger los medios de vida de millones de personas que dependen del cultivo de cacao en el mundo.