Juan Pérez Gil, dirigente de la agrupación Yoremes de los Ocho Pueblos Principales, informó que el plantón es de caracter indefinido
Por: Raúl Armenta Rincón
Unos 50 miembros de la Tribu Mayo tomaron este lunes la Delegación Regional del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), con sede en Etchojoa, debido a la falta de respuesta del gobierno a la demanda de un Plan de Justicia basado en los ejes de territorio, agua y desarrollo.
Juan Pérez Gil, dirigente de la agrupación Yoremes de los Ocho Pueblos Principales, informó que el plantón es indefinido y lo levantarán hasta que el director del instituto, Adelfo Regino Montes, los atienda y sobre todo, asuma un compromiso real de atender las necesidades prioritarias de la etnia Mayo.
Recordó que, en mayo del 2022, “en estas mismas instalaciones, el presidente Andrés Manuel López Obrador, que es un promotor incansable del bienestar de los indígenas, dejó instrucciones al INPI y al Gobierno del Estado para construir un buen Plan de Justicia”.
“Sin embargo, después de un año y medio, solamente hemos visto engaños y simulación por parte del Instituto, que ocasiona problemas y divide más a la Nación Yoreme, además de que presenta un plan que no es acorde a los problemas de los pueblos”, agregó.
Pérez Gil indicó que las demandas reales son un “barrido” del territorio, por parte de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) y otras dependencias federales y estatales, para identificar todas las hectáreas que han despojado a la tribu.
“Exigimos que se haga una revisión, ejido por ejido, parcela por parcela, para que se sepa bien todos los despojos de los que han sido víctimas nuestros hermanos; actualmente tenemos un territorio pulverizado, dejado a nada”, dijo.
El dirigente indígena mencionó que otro de los planteamientos principales es que la Conagua autorice la dotación de 50 millones de metros cúbicos anuales de la Presa Adolfo Ruiz Cortines al Río Mayo, como lo establece un Decreto Presidencial de 1954.
Enfatizó que el río pertenece a la etnia Mayo, a la que le da identidad como pueblo originario, por lo que es injusto que nunca se le haya reconocido en los hechos como un usuario más del Distrito de Riego.
Señaló que solamente con agua de manera constante, el afluente podrá mantenerse vivo y recuperar la flora, fauna, mantos freáticos y se pueda otra vez reforestar, entre otros beneficios que abrirían oportunidades de crecimiento, desarrollo y progreso.
En el movimiento de protesta participan indígenas de Sahuaral, Bachoco, San Salvador Tetapobampo, Las Bocas, Camahuiroa, Tierra Blanca Tesia, Conicárit, El Júpare, entre otros.
“La desesperación y el hartazgo llegó a su límite; ya ha sido mucha la indiferencia de dependencias del Gobierno Federal a demandas legítimas de la Nación Yoreme”, expresó Juan Pérez.