El uso de drones más sofisticados serán parte clave para hacer un campo más productivo y sostenible
Por: César Omar Leyva
El Valle del Yaqui, una de las regiones agrícolas más productivas de México, está a punto de experimentar una transformación radical en los próximos 100 años. Impulsada por la innovación tecnológica, la creciente demanda de alimentos y los desafíos del cambio climático, la agricultura en esta región se reimaginará por completo.
Consultamos con Gemini, un modelo de lenguaje grande multimodal (inteligencia artificial) desarrollado por Google y esto fue lo que predijo en cuanto al futuro del que en un momento fue conocido como el “granero de México”
AGRICULTURA DE PRECISIÓN LLEGÓ PARA QUEDARSE
La agricultura de precisión, que ya se implementa, será la columna vertebral de la producción en el Valle del Yaqui. Sensores avanzados, drones e inteligencia artificial permitirán a los agricultores monitorear en tiempo real las condiciones de cada planta, optimizando el uso de agua, fertilizantes y pesticidas. Esta tecnología permitirá:
- Cultivos personalizados: Cada planta recibirá la cantidad exacta de nutrientes y agua que necesita, maximizando el rendimiento y minimizando el desperdicio.
- Detección temprana de plagas y enfermedades: Los drones equipados con cámaras infrarrojas y sensores multiespectrales identificarán rápidamente cualquier amenaza a los cultivos, permitiendo una respuesta rápida y efectiva.
- Riego inteligente: Sistemas de riego automatizados, controlados por sensores y algoritmos, garantizarán que las plantas reciban el agua necesaria en el momento adecuado, reduciendo el consumo de agua y evitando la erosión del suelo.
CAMBIOS EN EL TIPO DE CULTIVOS
Según la Inteligencia Artificial, el cambio climático obligará a los agricultores a adaptarse a nuevas condiciones. Se espera que se cultiven variedades de plantas más resistentes a la sequía, el calor extremo y las plagas. Algunos cultivos que podrían destacar en el futuro incluyen:
- Cultivos transgénicos: Con características mejoradas como resistencia a plagas, tolerancia a la salinidad y mayor rendimiento.
- Cultivos perennes: Como los árboles frutales y los arbustos de bayas, que requieren menos agua y fertilizantes y contribuyen a la salud del suelo.
- Leguminosas: Que fijan nitrógeno en el suelo, mejorando su fertilidad y reduciendo la necesidad de fertilizantes sintéticos.
TECNOLOGÍA APLICADA AL ALMACENAMIENTO
Los sistemas de almacenamiento de alimentos también evolucionarán. Se emplearán tecnologías como:
- Almacenamiento en atmósfera controlada: Para conservar la frescura y calidad de los productos durante más tiempo.
- Envasado inteligente: Con sensores que monitorean las condiciones dentro del envase y alertan sobre cualquier deterioro.
- Procesamiento in situ: Para transformar los productos agrícolas en alimentos listos para consumir, reduciendo las pérdidas postcosecha y aumentando el valor agregado.
NUTRIRÁN LA TIERRA
La fertilización será más sostenible y eficiente. Se utilizarán:
- Biofertilizantes: Elaborados a partir de microorganismos que promueven el crecimiento de las plantas y mejoran la salud del suelo.
- Fertilizantes orgánicos: Como el compost y el estiércol, que enriquecen el suelo con nutrientes y materia orgánica.
- Sistemas de recuperación de nutrientes: Para reciclar los nutrientes contenidos en los residuos agrícolas y urbanos.
La combinación de tecnologías avanzadas, prácticas agrícolas sostenibles y una mayor conciencia sobre la importancia de la alimentación saludable dará lugar a un sistema alimentario más eficiente, resiliente y equitativo. Los agricultores del Valle del Yaqui desempeñarán un papel fundamental en la alimentación de una población mundial en constante crecimiento.
