Bandas magnéticas repelen al escualo; ante rumores de que pescadores quieren cazar al pez que mató al buzo, dijo que la especie está protegida
Por: Fabián Pérez
La agresión de tiburones blancos, como la ocurrida en Tojahui en días pasados, puede evitarse en la actualidad con brazaletes de bandas magnéticas, cuya función sirve para repeler al escualo, aseguró Raúl Apodaca Castro.
El exjefe federal de Pesca en Huatabampo aseguró que, ante este hecho, las autoridades de los tres niveles de gobierno deben de implementar programas y acciones para apoyar a los pescadores, que se encuentran sumamente olvidados.
Aseguró que una de las principales hipótesis de la agresión del tiburón blanco al buzo pudo deberse a que el escualo buscaba alimentarse de lobos marinos.
“Los tiburones blancos se alimentan de lobos marinos y se presume que su acercamiento se debió a que buscaba alimento. La naturaleza de este escualo es muy violenta”, explicó.
Comentó que el último antecedente de una agresión de un jaquetón en litorales de Sonora se dio en diciembre de 2018, en la isla San Jorge, en Puerto Peñasco, donde el animal le arrancó la pierna izquierda y la cadera a un buzo, provocándole la muerte.
Apodaca Castro lamentó la muerte del buzo Víctor Estrella, quien tenía más de 30 años dedicándose a la actividad pesquera en el puerto de Yavaros.
Comentó que se estima que un tiburón blanco tiene una fuerza de dos toneladas con su mandíbula.
Ante las versiones de pobladores, que señalan que se están organizando para ir a capturar a este espécimen, a fin de que no siga haciendo más daño a los pescadores, el exfuncionario aseguró que este escualo se encuentra en peligro de extinción, por lo cual está protegido por las autoridades de Pesca.
“Es una especie regulada a través de la norma NOM 029 por
Conapescay declarada en peligro de extinción por parte de Semarnat, en la norma oficial 059, por lo cual, no se puede capturar, cazar o retener viva o muerta,” compartió el exfuncionario.