Muy feliz y emocionado, el niño pasó un agradable momento al lado de su familia y del personal del 60 Batallón de Infantería
Por: Roke Arballo
A dos días de celebrar su cumpleaños número 3, Gregorio Eduardo Orozco Barrón tuvo el mejor de los regalos al cumplir su más grande sueño.
Como cada año, este viernes 3 de diciembre se llevó a cabo el Programa Soldado por un Día y en esta ocasión, Eduardo fue el afortunado.
El pequeño fue diagnosticado con cáncer en la retina, padecimiento que lamentablemente derivó en la pérdida de su ojo izquierdo.
Pese a su complicada situación, sus padres lo describieron como un niño alegre e inquieto, que los impulsa día a día a seguir adelante.
En punto de las 8:00 horas, el niño llegó a las instalaciones del 60 Batallón de Infantería acompañado de su familia y portando un uniforme a la medida.
Fue recibido por el segundo comandante del Batallón, José Juan Medina González y luego de degustar un rico desayuno junto a sus padres y varios elementos del Ejército, el pequeño Eduardo pudo conocer parte del equipamiento que los soldados utilizan, como equipos de comunicación y primeros auxilios, además conoció a “Sable”, un perro entrenado para la detección de narcóticos.
Posteriormente, el pequeño y su familia dieron un paseo a bordo de vehículos del Ejército y pudieron conocer las instalaciones del Batallón.
Para finalizar, el comandante y el personal del lugar le otorgaron un obsequio a Gregorio Eduardo, quien se despidió lleno de alegría.
“El motivo de esta ceremonia es honrar la presencia de un niño con características especiales, que se sienta con el entusiasmo y la fortaleza necesaria para seguir adelante, en la cual lo acompañamos”, dijo Medina González.
Por su parte, la madre de Gregorio Eduardo dijo sentirse contenta y agradecida de que el pequeño haya cumplido su sueño. “Desde siempre ha sido su sueño ser un soldado, siempre que los ve en la calle los saluda”, expresó.
