Dar propina es algo común en un restaurante; sin embargo, ese monto adicional por el servicio no es forzado; hay multa si te la cargan sin tu permiso
Por: Edel Osuna
Ser mesero es un trabajo de gran responsabilidad, pues, además de atender a los clientes, debe tener actitud de servicio y una habilidad para hacerlo, tratando de evitar errores.
En ese sentido, en muchos países se usa que en los restaurantes, al momento de pagar la cuenta, se deje un extra, propina, para el personal de servicio, la cual puede ser de entre el 10 al 20 por ciento del consumo o, en otros casos, se deja a la libre voluntad del comensal.
Sin embargo, hay que considerar que este no tiene carácter obligatorio, por lo que si un establecimiento te quiere obligar a pagarla, estarían incurriendo en una falla.
ESTO DICE PROFECO SOBRE LA PROPINA
A fin de sacar toda duda, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) señala: “los restaurantes no pueden exigir propina, ésta es una gratificación voluntaria”.
Y agrega que “la propina no puede incluirse en la cuenta sin consentimiento del consumidor”.
Así que si vas a un negocio y te quieren aplicar el cargo “a chaleco”, debes saber que existen requisitos; por ejemplo, que los restaurantes exhibir sus precios claramente y entregar comprobante a sus clientes.
También se considera obligatorio que los precios sean exhibidos en el menú, los cuales deben coincidir con el cobro que se realice.
¿CÓMO DENUNCIAR SI QUIEREN OBLIGARTE A PAGARLA?
En caso de que algún restaurante quiera obligarte a pagar la propina o a fuerza la incluya en la cuenta, sin tu autorización, repórtalo de inmediato ante Profeco.
Primero deberás escribir una carta al correo denunciasprofeco@profeco.gob.mx o a en las cuentas de redes sociales de la dependencia.
En él incluirás nombre o razón social del negocio infractor, así como su domicilio completo; además, puedes llamar al número (55) 5568 8722.
Quienes violen estas disposiciones serán multados, con sumas que dependerán de la capacidad económica del negocio, y en ocasiones pueden llegar a 3 millones de pesos.
Así las cosas: esté atento, y si le dieron buena atención y quiere gratificar a los trabajadores del establecimiento, dé la propina, pero no permita, bajo ninguna circunstancia que le obliguen a pagarla o se la carguen a su cuenta.
