El exceso de sodio en la dieta está asociado a problemas de salud como la hipertensión arterial y enfermedades cardiovasculares
Por: Andrés Manuel Contreras Alaniz
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) ha publicado los resultados de un estudio exhaustivo sobre la calidad de 49 productos de chorizo disponibles en el mercado mexicano.
El estudio, publicado en la Revista del Consumidor correspondiente al mes de junio de 2024, revela información de suma importancia sobre la producción, composición y veracidad de la información nutrimental de estos productos.
El estudio de Profeco identificó varias marcas de chorizo que no cumplen con lo que declaran en sus etiquetas, presentando discrepancias en el contenido de grasa, sodio y calorías. Por ello, en esta ocasión te compartimos cuáles son las marcas con más calorías y con mayor cantidad de sodio.
CHORIZO CON MÁS CALORÍAS
De acuerdo con lo publicado en la Revista del Consumidor, esta es la marca de chorizo con mayor cantidad de calorías en México:
- Reserva de la casa Chata, con un contenido calórico real de 329 kcal/100 g, superando ampliamente las 230.2 kcal/100 g declaradas.
CHORIZOS CON MÁS SODIO
Varias marcas presentaron niveles de sodio superiores a los declarados en sus etiquetas, destacando:
- Conde de luna argentino (800 mg/100 g)
- Conde de luna semimaduro (777 mg/100 g)
- Chata (498 mg/100 g)
- Obertal (869 mg/100 g)
- Parma (1588 mg/100 g)
- Zwan (840 mg/100 g)
RECOMENDACIONES PARA LOS CONSUMIDORES
Cabe destacar que el exceso de sodio en la dieta está asociado a problemas de salud como la hipertensión arterial y enfermedades cardiovasculares, por lo que este hallazgo es motivo de preocupación para los consumidores.
Además de estos casos, el estudio de Profeco también identificó otros productos que incumplen con la normativa, como aquellos que contienen menos producto del declarado o que incluyen ingredientes no especificados en la etiqueta.
Ante esta situación, Profeco hace un llamado urgente a los consumidores a leer detenidamente las etiquetas de los productos y a desconfiar de aquellos que prometen ser "saludables" o "bajos en sodio".