Según el SMN, para este martes se esperan temperaturas extremadamente altas, con máximas superiores a los 45°C en 10 estados del país
Por: Andrés Manuel Contreras Alaniz
La segunda ola de calor de la temporada primaveral ha golpeado a México, elevando las temperaturas por encima de los 30°C en todo el país. Este fenómeno, que comenzó el viernes 3 de mayo, llega apenas tres semanas después de la primera ola de calor del año.
Según el Servicio Meteorológico Nacional, para este martes se esperan temperaturas extremadamente altas, con máximas superiores a los 45°C en estados como Campeche, Chiapas, Guerrero, Michoacán, Oaxaca, San Luis Potosí, Tabasco, Tamaulipas, Veracruz y Yucatán.
Además, se pronostican temperaturas que oscilarán entre los 40 y 45°C en regiones como Coahuila, Colima, el norte de Hidalgo, Jalisco, Morelos, Nayarit, Nuevo León, el norte de Puebla, Quintana Roo, el norte de Querétaro y Sinaloa.
En otras zonas del país, se esperan temperaturas entre los 35 y 40°C, incluyendo Aguascalientes, Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Durango, el suroeste del Estado de México, Guanajuato, Sonora y Zacatecas. Mientras que en Ciudad de México y Tlaxcala se prevén temperaturas de 30 a 35°C.
¿QUÉ ES UNA OLA DE CALOR Y CÓMO SE PRODUCE?
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) define una ola de calor como un "calentamiento importante del aire o invasión de aire muy caliente, sobre una zona extensa", que suele durar de unos días a una semana. Se caracteriza por al menos tres días consecutivos en los que las temperaturas tanto en las tardes como en los amaneceres están por encima de lo normal.
Especialistas consultados por el portal de El País explican que, para el resto de la primavera, se esperan temperaturas elevadas y algunas lluvias. Asimismo, prevén que conforme avance la primavera, se produzca una transición del fenómeno de El Niño al de La Niña hacia el verano, que comenzará el próximo 20 de junio.
El fenómeno de El Niño, asociado a un calentamiento anómalo del océano Pacífico ecuatorial, provoca una primavera más calurosa y seca, mientras que La Niña propicia lluvias debido a un cambio en la circulación global.
Debido a estas condiciones, se espera que a la época calurosa y de sequía le siga una temporada de lluvias y ciclones tropicales con mayores precipitaciones sobre varias zonas del país.
