El religioso llamó la atención por hablar en favor de los homosexuales, de los divorciados y de la ordenación sacerdotal de las mujeres
Por: Edel Osuna
Un sacerdote, miembro de la Iglesia católica de Alemania, fue hallado muerto, un día después de que se le interrogara y suspendiera por un caso de violación ocurrido hace 30 años.
Al respecto, a través de un comunicad, la Diócesis de Limburg detalló que el religioso había ostentado diversos cargos eclesiásticos por varios años, pero no expuso las condiciones de muerte del sujeto, identificado como P. Christof May, de 49 años de edad.
May fue suspendido de su cargo por el obispo Georg Beatzing, a fin de que se iniciar la investigación en torno a la acusación y se definiera el caso.
Su muerte, señala la Diócesis, “ha sido un golpe duro, causa consternación y desconcierto, y plantea muchas cuestiones, ya que durante años, el sacerdote había sido confiado con cargos responsables en nombre del obispo”.
Tras su extraña muerte, la Diócesis de Limburgo envió sus condolencias a su familia, y, al mismo tiempo, aseguró que sus pensamientos están con quienes denunciaron los supuestos abusos.
“Vamos a hacer todo lo posible para mantenernos unidos en esta situación verdaderamente difícil”, puntualizó.
Desde septiembre de 2018, Christof May era rector de seminario alemán Limburgo del Lahn, ubicado al suroeste del país teutón, y llamó la atención de los medios al llamar a la Iglesia católica a que se abriera a las parejas divorciadas y a los homosexuales que se han vuelto a casar.
Y también criticó el que las mujeres no pudieran ser ordenadas como sacerdotes.