El embajador estadounidense negó que su país sea responsable de la creciente ola de hechos violentos de 12 días en varios municipios del Estado
Por: Marcela Islas
En respuesta a las declaraciones del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) sobre la corresponsabilidad de Estados Unidos en la violencia en Sinaloa, el embajador Ken Salazar defendió la posición de su país.
Durante una conferencia de prensa en el Consulado General de Estados Unidos en Ciudad Juárez, Salazar enfatizó que las masacres, como la reciente en Morelos, no pueden ser atribuidas a Estados Unidos.
“No se puede entender cómo puede ser la responsabilidad de los Estados Unidos de las masacres que vemos en diferentes lugares, como lo que se vio en Morelos ayer o lo que se está viendo en Sinaloa, eso no es culpa de los Estados Unidos”, declaró Ken Salazar.
López Obrador había expresado su preocupación por el secuestro y traslado del narcotraficante Ismael "El Mayo" Zambada a Estados Unidos, argumentando que este tipo de acciones unilaterales generan inestabilidad en México. El mandatario subrayó que es fundamental considerar al Gobierno mexicano en decisiones que afectan la seguridad del país.
PROBLEMA DE VIOLENCIA ES COMPLEJO
Por su parte, Salazar declaró que el problema de violencia en México es complejo y no puede ser simplificado echando culpas a un solo país. Reiteró que la cooperación entre ambos Gobiernos es esencial y que los resultados en la lucha contra el crimen organizado, como las detenciones de Ovidio Guzmán y Rafael Caro Quintero, son frutos de este trabajo conjunto.
El embajador también destacó los esfuerzos conjuntos en la lucha contra el fentanilo, el tráfico de armas y personas, y reconoció los avances en la gestión migratoria entre ambos países. “Estamos trabajando para atender las causas de la migración y lograr una frontera moderna y segura”, afirmó Salazar.
La visita del embajador, que coincide con los festejos del 248 aniversario de la Independencia de Estados Unidos, resalta la importancia de la colaboración binacional en temas de seguridad y migración, mientras se busca abordar las raíces de la violencia en México.