Tampoco condenó el hecho; OMS y cuatro naciones europeas condenaron el hecho, pues la agencia es fundamental para los palestinos
Por: Edel Osuna
Tras la resolución del Parlamento de Israel (Knéset), de prohibir la presencia de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA), México lamentó las restricciones, sumándose a la comunidad internacional que condena la interferencia de ayuda humanitaria en Gaza.
Sin embargo, apegado a su postura de respeto a las naciones, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) se abstuvo de condenar al Knéset, por su determinación.
A través de sus redes sociales, la Cancillería mexicana dijo que la Agencia de ayuda para los palestinos "es vital para el apoyo humanitario de esa población", y lamentó "las restricciones impuestas a la Agencia, que impiden el cumplimiento de su mandato".
Además, llamó "a todas las partes en conflicto a respetar el derecho internacional humanitario".
Contrario a lo que otros países hicieron, México no condenó las medidas votadas por el Parlamento israelí, que prohíben el trabajo humanitario de la Agencia en territorio israelí, a la vez que impide a servidores públicos a trabajar con sus agentes.
Quienes condenaron el hecho fueron António Guterres, secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), quien dijo que la aplicación de esas leyes "impediría probablemente a la UNRWA de continuar su labor esencial", y exigió que Israel cumpla con sus obligaciones.
También se manifestó Tedros Adhanom Ghebreyesus, titular de la Organización Mundial de la Salud (OMS), quien desaprobó la resolución y calificó la votación como "intolerable", ya que las consecuencias serían "devastadoras", aseveró.
España, Noruega, Irlanda y Eslovenia, que recientemente reconocieron al Estado de Palestina, condenaron el voto del Knéset, y en declaración conjunta recalcaron que la UNWRA es "irremplazable" para los palestinos.